El líder del PP, Pablo Casado, alertó en una comparecencia minutos después de la ofrecida por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de que «España no tiene a nadie al timón» frente a la pandemia porque el jefe del Ejecutivo está haciendo una «dejación de funciones» y se «parapeta» tras un conflicto competencial para dejar la responsabilidad a las autonomías. Así, en su discurso ante los medios, Casado criticó a Sánchez que se «escabulle» en otras administraciones y reprochó su «imprevisión e indolencia», advirtiendo de que, según él, hay «ausencia absoluta de liderazgo». Además, insistió en que dará su apoyo a las modificaciones legales necesarias para poder adoptar medidas frente a los rebrotes, pese a la «incompetencia» del Gobierno, que cree que vuelve a cometer los mismos errores que en marzo con su «discurso triunfalista» sobre la covid.

Casado explicó que Sánchez «no puede ampararse en el burladero» de las autonomías y consideró que el estado de alarma, que el presidente del Ejecutivo ha dejado en manos de las comunidades, «no es necesario en los Gobiernos que funcionan y cumplen su responsabilidad» al afrontar con medidas adecuadas la pandemia. En esta línea, incidió en que las autonomías del PP «han ido por delante durante el verano» en la aplicación de medidas de contención de contagios, como limitar número de personas en reuniones, prohibir fumar en la calle o ejecución de test masivos, según sus palabras.

Pese a estas palabras, al ser preguntado sobre si va a recomendar a las comunidades en las que gobierna su partido que no soliciten este estado de alarma, se limitó a decir que lo normal es «responder ante la pandemia sin que haya una excepcionalidad constitucional», porque «nos va a acompañar durante meses, hasta que haya vacuna». Ante ello, Casado reiteró que la legislación actual en vigor permite que el Gobierno tenga el mando único ante una pandemia internacional, según el artículo 14 de la Ley general de Sanidad, pero que no quiere ejercer su responsabilidad y que para limitar libertades fundamentales «no es cierto» que sea necesario un estado de alarma.

Asimismo, cuestionó si cada vez que haya un rebrote habrá que ir al Congreso para votar el estado de alarma para la comunidad correspondiente y, a mayores, puso en duda que esa medida vaya a contar con el apoyo parlamentario de la mayoría de Gobierno porque, «si no le apoyan ni para la vuelta al colegio», cómo le van a apoyar en esta otras cuestiones.

No ejerce la «lealtad»

Sobre la apelación de Sánchez a la lealtad de administraciones y partidos, Casado reprochó que «la pide pero no la ejerce» y va de «falso moderado» queriendo garantizar la unidad, pero sin romper con su socio de Gobierno. Así, ha insistió, de cara a la ronda de contactos que el presidente iniciará la semana que viene, que el PP no puede llegar a acuerdos con Podemos como «socio preferente» en el Gobierno y remarcó a Sánchez que «no se puede sorber y soplar al mismo tiempo». Fuentes de la dirección nacional de los populares, por ello mismo, reconocen que las expectativas de acuerdo con vistas a la previsible reunión de Sánchez y Casado de la semana que viene son prácticamente nulas.