La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Glòria Calero, confirmó ayer que tienen dos solicitudes de manifestación para el día 9 d'Octubre, Día de la Comunitat, en el que ya se han suspendido los actos oficiales como la procesión cívica, e hizo un llamamiento a los convocantes de las marchas para que se las «replanteen» por la pandemia. «No es momento de manifestaciones», dijo Calero tras reunirse con el edil de Protección Ciudadana de València, Aarón Cano, para coordinar las acciones de seguridad en la ciudad. «No habrá actos pero sí algunas actuaciones», argumentó Calero, quien confirmó que tienen dos peticiones para sendas manifestaciones ese día. Aunque la delegada reconoce que es un derecho constitucional, hizo un llamamiento para que «se lo replanteen» y se actúe «con responsabilidad». «Dependemos de la responsabilidad individual. Nos piden las tres 'emes', manos, metros y mascarilla y en una manifestación es difícil controlarlo», indicó.