La Confederación Empresarial Valenciana (CEV) apostó ayer por una armonización fiscal «en todo caso a la baja» en España y no ve desleal que haya competencia entre comunidades autónomas porque «es lo lógico, igual que hay entre los ayuntamientos». «Por eso se llama estado de las autonomías: dentro de una lógica impositiva, que haya comunidades que incentiven la inversión es lo lógico», defendió su presidente, Salvador Navarro, en declaraciones antes de presentar el plan de industria de la patronal a Compromís. Ante las críticas de dumping fiscal a Madrid, insistió en la negativa de los empresarios a subir impuestos, ante las subidas fiscales que prevé la ley de acompañamiento a los presupuestos de la Generalitat para que paguen más las rentas más altas. «Desde el primer momento dijimos que no», recalcó.

Navarro afirmó que el impuesto de patrimonio «no existe de forma generalizada en Europa y penaliza el ahorro, por lo que hay que eliminarlo».

Fuera del ámbito fiscal, la CEV trasladó su plan de industria a Compromís. Por parte de la coalición que forma parte del Gobierno valenciano, Fran Ferri dijo que «no esperaba otra posición» por parte de la CEV, pero sí coincidió en la apuesta por la reindustrialización como motor económico. «Se debe potenciar y enriquecer», dijo. «Cuanto más industria tengamos tendremos una mayor redistribución de la riqueza», señaló.

Eso sí, Compromís defendió la autonomía fiscal para gestionar tributos ya que cada comunidad tiene una realidad diferente si bien se mostró a favor de tomar medidas para evitar el dumping fiscal que realiza la comunidad de Madrid. Para Compromís, es competencia desleal porque se beneficia de mejores recursos financieros y del efecto capitalidad, que hace que grandes fortunas huyan a Madrid y evadan impuestos.