Los más de 10.000 afectados por el cierre de Dentix el pasado octubre están a la espera de que Vitaldent (que se ha quedado con nueve clínicas de la anterior cadena) asuma los tratamientos pendientes. Esta última empresa ya se ha comprometido a hacerlo con el 90 % de los afectados, pero ¿qué pasa con ese 10 %? La Unión de Consumidores de la Comunitat Valenciana se reunió hace unos días con Vitaldent para aclarar «dudas de procedimiento».

Así lo explica el secretario de la entidad, Vicent Inglada, que calificó de forma positivo el encuentro. «Nos dio seguridad, vimos que Vitaldent responde a una colaboración con las Administraciones» dice, al tiempo que opina que este modelo de negocio sanitario «busca el beneficio económico más que la salud de los pacientes».

En este sentido, Inglada expresó su preocupación por este 10 % que tendrá dificultades para poder terminar su tratamiento y que está dividido en dos categorías.

La primera, pacientes que pagaron al contado y que su clínica no ha sido adquirida por Vitaldent: «Ese ciudadano ha hecho un pago y no se sabe dónde está su dinero porque la clínica ya no existe, hay que reclamar», recomienda Inglada.

En la segunda categoría se encuentran las personas que pagaban el tratamiento por cuotas y que, al quebrar Dentix, esa deuda pasó a entidades financieras. «Hay que reclamar por incumplimiento de contrato para dejar de pagar esas cuotas sin recibir un tratamiento», apunta Inglada.

Por su parte, Vitaldent explicó hace unas semanas, tal como publicó este periódico, que «en el caso de los pacientes de las clínicas que quedaron fuera de la operación, se asumirá la totalidad de tratamientos financiados por dichas entidades financieras (estas son: BBVA, Cetelem, Abanca Servicios Financieros, Pepper Money y Sabadell Consumer Finance), mientras que aquellos que pagaran en su día mediante entrega de efectivo tendrán acceso a una oferta especial para terminar su tratamiento».

Desde la Unión de Consumidores apuntaron que aunque Vitaldent sí incluirá «los tratamientos pagados», no se hará cargo de los problemas añadidos en la salud por el paso del tiempo.

«Con la salud no se juega»

La organización vuelve reclamar que las Administraciones públicas actúen como mecanismos de control hacia estas empresas odontológicas. «Vitaldent está respondiendo a través de encargos para solucionar los máximos casos posibles, pero con la salud no se juega».