«Nunca me arrodillaré ante los países catalanes». La portavoz del PP en el Ayuntamiento de València y diputada en las Corts, María José Catalá, exhibió ayer un discurso de esencias valencianistas que muestra parte de la estrategia del nuevo PP que liderará, salvo sorpresa, el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón y del que Catalá será la número dos.

La diputada defendió ayer en el pleno de las Corts una proposición no de ley, iniciativa suya, para exigir al Gobierno la rectificación de la redacción del BOE en el que se recogió que las sociedades musicales valencianas nacen de un movimiento «mimético al de las agrupaciones corales catalanas». En el discurso, Catalá acusó a la izquierda de tibieza y de ser el hermano pobre del catalanismo.

PSPV y Compromís ya han anunciado que votarán a favor de la iniciativa y Podem se abstendrá, de forma que achican el campo de juego que tiene Catalá para desplegar su discurso identitario. El diputado de Compromís Jesús Pla remarcó que jamás Català hubiera llevado a la cámara una iniciativa similar de haber hecho mención a la cultura española.

La izquierda reprochó a Catalá que use las Corts en su campaña interna. Para la diputada del PP, lo que ocurre es que la izquierda está preocupada por el congreso del PP. La propuesta apoya la reclamación de la Federación de Sociedades Musicales ante el Ministerio de Cultura que dirige el valenciano Rodríguez Uribes sobre el origen de las bandas valencianas.