Tras unas jornadas en las que el tiempo en Valencia ha estado marcado por la amenaza de tormentas casi a diario, las temperaturas volvieron a subir ayer de forma más que apreciable en todo el territorio para dar paso hoy domingo a un día en el que la nubosidad será mucho más abundante, tal y como detalla en su predicción la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
No obstante, la institución estima que, pese a crecer la nubosidad mucho más, no es probable que se registren lluvias, con lo que la jornada continuará en la misma línea que estos días atrás aunque con una nota destacada: el regreso de la calima, que vuelve a entrar desde el sur para enrarecer de nuevo el cielo y el ambiente.
El tiempo en Valencia
En líneas generales, el tiempo en Valencia se anuncia con "intervalos de nubes medias y altas, con nubosidad de evolución diurna en el interior septentrional a partir de mediodía". Por la mañana se esperan "brumas o nubosidad baja matinal en zonas litorales" mientras que las temperaturas serán muy similares a las de ayer sábado, o incluso algo superiores, a excepción de las zonas de interior, donde se registrará "un descenso de las máximas".
En lo que se refiere al tiempo en València, la Aemet no espera que caigan precipitaciones aunque sí revela que el cielo quedará muy nuboso o incluso cubierto en algunos momentos de la mañana. Aún así, la probabilidad de que se registre lluvia será nula. A media mañana, la previsión es que el sol tome el relevo a las nubes, pese a que éstas no llegarán a desaparecer del todo y el cielo quedará enmarañado con nubes altas hasta última hora de la tarde, cuando la nubosidad volverá de nuevo a crecer.
En cuanto a las temperaturas, el termómetro se quedará en valores muy similares a los de estos días , con mínimas de 23 ºC y máximas que no superarán los 30 ºC a la sombra, aunque la sensación térmica será de más calor, llegando incluso a los 33 grados en las horas centrales del día; de hecho, durante prácticamente toda la jornada la sensación será de estar de manera permanente por encima de los 30 ºC pese a que el mercurio esté por debajo de este límite, algo que se verá acrecentado por los altos niveles de humedad ambiental que se esperan, lo que disparará el bochorno.
