El juez de Instrucción número 20 de València, que dirige la investigación contra Jorge Ignacio P. J. por supuestamente matar a tres mujeres —Marta Calvo, Lady Marcela Vargas y Arliene Ramos— e intentarlo con otras ocho, ha confirmado su decisión de que la madre del presunto asesino declare por videoconferencia desde Palma de Mallorca. El magistrado ha accedido así a la petición formulada por la propia testigo, Pilar Jacome, que adujo «motivos económicos y gravosidad en el desplazamiento» para viajar desde la capital balear, donde reside, a València, como pedían las acusaciones particulares, que exigían que la declaración fuese presencial.
El juzgado se pronunció a última hora de ayer para rechazar el recurso presentado por los abogados de la madre de Marta Calvo, los letrados Pilar Jové y Vicente Escribano, dando así por zanjada la cuestión. Tal como adelantó Levante-EMV, la acusación particular ejercida en nombre de la madre de Marte presentó este lunes por la mañana un recurso ante la decisión del juez de permitir que la declaración fuese por videoconferencia desde Palma.
En el recurso, esgrimían que el testimonio de Pilar Jacome en la causa «es fundamental» y recordaban que la ley prevé que todos los interrogatorios de testigos sean presenciales y solo permite que sean a distancia «en casos excepcionales». Además, refutaba la supuesta gravosidad económica del viaje para la testigo aportando al juzgado una oferta de billete de ida y vuelta desde Palma de Mallorca a València, para esta misma mañana, por un importe de 25,97 euros, para rebatir, de nuevo, que el viaje le supusiese a la testigo un problema económico, como argumentó para eludir el interrogatorio presencial.
Tal como ha venido publicando este diario, el juez ordenó el pasado 4 de octubre, a petición de las acusaciones particulares ejercidas por familiares de las tres víctimas mortales y por las ocho supervivientes, que Pilar Jacome fue citada como testigo para comparecer en su juzgado con el fin de prestar declaración para averiguar cuánto sabía o no de las andanzas de su hijo y de su presunta implicación en los homicidios de Marta, Lady Marcela y Arliene.
Sabía «todo lo sucedido»
La solicitud realizada por los abogados de las víctimas se sustentaba, entre otras cosas, en la declaración prestada de manera espontánea por un amigo de Jorge Ignacio P. J., en marzo del año pasado pero que no se ha conocido hasta este mes de septiembre, en la que, a preguntas de la Guardia Civil, ese testigo consideró que la madre del presunto asesino conocía «todo lo sucedido», y basaba la afirmación en la «especial» relación que había entre madre e hijo y en la actuación de la mujer como consejera de Jorge Ignacio P. J. «en sus tratos de drogas».
La madre del acusado, además, viajó de Palma a València al día siguiente del asesinato de Marta Calvo y permaneció con su hijo 48 horas, tras las cuales regresó a la isla llevándose consigo unas prendas de Jorge Ignacio P. J., así como su iPad y el router que utilizaba habitualmente para conectarse desde su casa en l’Olleria. La madre solo devolvió esos objetos doce días después, y una vez que la Guardia Civil la hizo volver a València para entregárselos a los investigadores.
