La Sección Tercera de la Audiencia de València ha condenado a 28 años de prisión por dos delitos de agresión sexual a menor, con violencia y abuso de superioridad, a un hombre que violó a su sobrino en dos ocasiones, cuando la víctima tenía 8 y 9 años de edad.

La Sala le impone también el pago de una indemnización de 60.000 euros por los daños psicológicos y morales que sufrió el niño, al que no podrá acercarse a una distancia inferior a los 500 metros y con el que no podrá comunicarse por ningún medio durante 40 años.

Ambas violaciones, que le dejaron secuelas físicas detectadas en una prueba médica cuando tenía 11 años, fueron cometidas en momentos en los que el pequeño, al que amenazó de muerte para que callara, quedaba a su cargo.