«Un salto de 30 años en la Administración». Así definió la vicepresidenta y consellera de Igualdad, Mónica Oltra, el decreto sobre tipología y funcionamiento de los servicios, programas y centros de servicios sociales cuando lo presentó recientemente.
Bajo un nombre tan largo y burocrático se esconde un cambio de pies a cabeza en el Sistema Público Valenciano de Servicios Sociales. Un gran avance. Ayer el Consell autorizó su tramitación por vía de urgencia.
En síntesis, este decreto es una «enciclopedia» (así lo calificó Oltra) que deja en un solo texto más de 15 normas distintas sobre tipología de centros y servicios, algunas de las cuales se remontan a los años noventa.
También tiene en cuenta los aprendizajes de la pandemia, actualiza las ratios teniendo en cuenta que cada vez habrá más gente mayor y mete dentro algunos derechos que quedaban en tierra de nadie o no estaban previstos. Organiza todo el totum revolutum de servicios sociales en un solo decreto.
Además de organizar, el decreto blinda las condiciones de los centros y garantiza la proximidad en el territorio. «Ya está bien de poner un mini recurso donde Cristo perdió el gorro, los recursos son de la Comunitat, y tienen que estar en todo el territorio. Todos nos hacemos cargo de todos, así que los servicios tienen que estar donde está la gente», dijo Oltra cuando lo anunció. Además, este recurso garantiza que cada provincia tenga un recurso de cada tipo por una cuestión de «equidad territorial».
El decreto blinda las condiciones de los centros y garantiza la proximidad en el territorio
Evitar duplicidades
El decreto también organiza servicios y programas, con el gran objetivo de evitar duplicidades y definir muy bien las funciones de cada centro y servicio para que sean eficientes. "Que no haya nadie desconectado, los servicios sociales deben funcionar como un organismo vivo", dijo Oltra en la presentación. Por otra parte, este decreto se hace cargo de todos los derechos anteriormente no previstos en las normativas anteriores, todo en el mismo texto.
De esta manera, «se moderniza y unifica la normativa reguladora de los recursos de servicios sociales además de incorporar los aprendizajes derivados de los efectos de la pandemia», según un comunicado de Igualdad.
Con el decreto de tipologías de centros, servicios y programas también se actualizan las ratios de todos los recursos incluidos en el sistema, teniendo en cuenta a la población más mayor con dependencia que vive en casa sola.
Además, «se deslocalizarán los puntos de atención y los horarios de los centros de atención diurna, que ya no serán necesariamente de lunes a viernes de 9 a 17 horas».
Potenciar los cuidados en casa
En el decreto también se plantea una atención domiciliaria más completa y una mejora de las ratios en los recursos residenciales o centros "para responder a las verdaderas necesidades de las personas, garantizando unas condiciones de atención dignas y de calidad", según Igualdad.
Además se regulan al detalle las condiciones materiales, funcionales y de personal de centros y servicios que se exigirá a cualquier recurso, y que ya son de aplicación, muchas de ellas, en los centros públicos y concertados. El decreto también incorpora nuevas figuras profesionales.
Junto a los demás decretos desarrollados por la Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas en el marco de la ley de Servicios Sociales Inclusivos, "el objetivo con esta regulación es generar un sistema coherente, organizado y planificado que se guíe por los criterios de calidad, eficiencia y accesibilidad, para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía y garantizar la protección de derechos de las personas", asegura conselleria.
