El adelanto electoral no entra en los planes de Ximo Puig "a día de hoy". El 'president' de la Generalitat ha enfriado este martes la posibilidad de sacar las urnas antes de tiempo que viene esparciendo el PP valenciano desde hace algunas semanas, si bien se ha cubierto las espaldas con esa coletilla temporal que remarca que el escenario podría cambiar.

Según ha asegurado el jefe del Consell, el único con potestad para decretar el adelanto (como ya hizo en 2019 para enfado de Compromís), el "plan" ahora mismo pasa por agotar la legislatura. "Es lo que está previsto en estos momentos", ha indicado a la salida de un acto organizado por El Español.

Lo contrario, ha añadido, sería caer en el "cortoplacismo electoral" porque ahora mismo "no hay ningún motivo" para repetir el movimiento, especialmente en un contexto en el que interesa ir de la mano de los alcaldes, gran baza del PSPV. Así las cosas, Puig ha asegurado que va a priorizar la "estabilidad" del Botànic, que ha definido como "factor fundamental para el desarrollo económico de una sociedad" y a la que ha atribuido algunos éxitos recientes en materia industrial como la gigafactoría de Volkswagen o la electrificación de Ford Almussafes.

Sin embargo, el president no ha descartado totalmente el extremo de un adelanto electoral, dejando la puerta ligeramente abierta. "Lo haré (adelantar elecciones) en función de una situación que beneficiara al conjunto de la Comunitat Valenciana. Si no, agotaremos la legislatura".

El PP calienta el posible adelanto

Las declaraciones de Puig tratan de cortar el paso al runrún sobre el adelanto, promovido en buena parte desde el PPCV. De hecho, el líder de los populares valencianos, Carlos Mazón, que el lunes compartió acto con Alberto Núñez Feijóo y otros barones en Madrid, hizo referencia a ese posible cambio de fechas durante su intervención y estancia posterior en la capital.

La Comunitat Valenciana va a ser una de las batallas centrales y será decisiva para la posterior lucha del gallego con Pedro Sánchez por la Moncloa, con lo que darle peso a esta posibilidad de adelanto sería una forma de Mazón de 'exigir' a la dirección nacional una especial atención a la autonomía.

De momento, el PP ya tiene previsto celebrar en València a finales de enero un gran acto para proclamar a sus candidatos a alcalde en las capitales de provincia. La ciudad será a su vez clave en la decisiva lucha por la Comunitat Valenciana y se interpreta como un guiño y un gesto de Génova hacia María José Catalá, la aspirante popular para recuperar el cap-i-casal.

Ximo Puig, en el I Foro Económico Valenciano Biel Aliño/EFE