Hablando de las superlunas de agosto

Las superlunas se producen cuando la órbita del satélite está en su perigeo, lo más cerca posible a la Tierra.

Las superlunas se producen cuando la órbita del satélite está en su perigeo, lo más cerca posible a la Tierra. / El Periódico de Catalunya

Natacha Payá

Somos muchas las personas que esperamos con impaciencia algún fenómeno astronómico que no nos deje dormir. En este 2023 las citas astronómicas nos han regalado imágenes maravillosas, y ahora en agosto es el momento de la superluna de esturión, que recién ha sido, y de la Luna azul, ¿habrá alguna cosa más?

Según la NASA, una superluna se produce cuando la órbita de la Luna está más cerca a la Tierra y coincidiendo con su fase de plenitud. Para aclararnos, el punto más cercano de la Luna se conoce como perigeo y suele quedar aproximadamente a unos 363.300 kilómetros de la Tierra.

Cuando ocurre este fenómeno, nuestro satélite luce más brillante de lo normal, de ahí lo de «superluna». Este fenómeno a simple vista es bastante sutil, pero el observador avanzado tiene mucho que ver y aprender.

Desde las culturas primitivas hasta la actualidad, los seres humanos hemos compartido una inevitable fascinación por nuestro satélite. Tanto así, que hasta dependían de ella para tener noción del tiempo. Básicamente, no registraban el tiempo como lo hacemos ahora, sino que atribuían a cada una de las lunas llenas un apodo característico para realizar un seguimiento de las estaciones. Entonces, ¿por qué creen que esta última se ha llamado superluna del esturión?

La semana pasada para Meteored expliqué algunas cosas. Primero, que la Luna no ha tenido forma de esturión. Básicamente, ha sido un plenilunio normal, pero ha coincidido con un perigeo lunar, y este evento fascinante ocurrió ayer, el martes 1 de agosto. Ha recibido este nombre porque los primeros nativos norteamericanos tenían mayor facilidad de pescar estos largos peces en el mes de agosto.

Ahora bien, no todas las tribus la conocían de la misma manera. El pueblo de los ojibwa, nativos del sur de Canadá, por ejemplo, la denominaban Luna de moras, porque la cosecha de este fruto coincide con la llegada de esta luna llena.

Sin embargo, esto no acaba aquí, este mes de agosto no se queda atrás, ¡las citas astronómicas no paran! Como muchos sabrán en este mes tiene lugar la lluvia de estrellas más importante del verano: las lágrimas de San Lorenzo, que coincidirá también con la segunda luna llena de agosto. Esto es muy importante puesto que también será una superluna y será visible el día 31.

El fenómeno de una segunda luna llena en el mismo mes se conoce como «Luna azul» y se produce aproximadamente cada dos años y medio y será la penúltima en cerrar este año 2023.