La plaga de la procesionaria de pino sube respecto al año anterior

Las altas temperaturas de enero han dado el «pistoletazo de salida» a una plaga dañina para los árboles y muy peligrosa para los perros 

Varios ejemplares de la procesionaria del pino

Varios ejemplares de la procesionaria del pino / Ricardo Sales García

Vicent Rodríguez

La plaga de la procesionaria del pino (Thaumetopoea pityocampa) vuelve a subir respecto al año pasado. Según los técnicos de la Conselleria de Medio Ambiente, existe un ligero aumento de la infestación, continuando así con una tendencia al alza que comenzó en 2021. "A pesar de ello, permanece muy por debajo de la media de los últimos 28 años, con un 0,43 de índice de infestación ponderada en el año 2023, frente al 0,60 de la media histórica", explica la Conselleria en su informe.

La Conselleria de Medio Ambiente incluye que en la prospección efectuada en el año 2023, los niveles bajos constituyen, como suele ser habitual, un porcentaje muy elevado de la superficie prospectada, concretamente un 90 %, mientras que los niveles medios representan tan solo un 9 %. Por otro lado, las superficies con niveles altos, apenas suponen un 0,8 % del total, aseguran los técnicos.

Niveles de cada provincia

El informe elaborado por la Conselleria indica que en relación con los niveles medios, la provincia de Alicante es la que presenta la mejor situación, con tan solo un 6,5 % de su superficie con esta infestación, frente al 9 % de la media autonómica. También incluye que las superficies en niveles medios en Castellón son las más elevadas, representando el 9,6 % del total de la superficie prospectada en cada provincia. En medio de las dos anteriores, se encuentra València, con un 9,1 % de superficie con el nivel intermedio de afección, según la Conselleria de Medio Ambiente.

"En general, las poblaciones más elevadas de procesionaria se han concentrado en el año 2023 en las zonas de mayor altitud de las comarcas del interior de las tres provincias, siendo casi inexistentes los daños detectados en la franja costera", manifiestan los técnicos.

La evolución temporal

Según indica el informe de la Conselleria, en el año 2023 se ha mantenido la tendencia al aumento de los niveles de infestación iniciada en 2022, tras varios años consecutivos de descenso. En 2022, se habían registrado 12.481 hectáreas (2,6 % de la superficie prospectada), señala. "No obstante, se trata de un crecimiento moderado, en absoluto preocupante", explican los técnicos de la Conselleria de Medio Ambiente.

Llegada de la plaga de procesionaria

La Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (Anecpla) alertaba hace una semana de la llegada de la plaga de oruga procesionaria "en pleno invierno", cuando antes tenía lugar entre los meses de marzo y junio, y ha pedido a las Administraciones locales campañas de prevención anuales que se ejecuten en la temporada de otoño.

Las temperaturas del mes de enero en algunas zonas de España, de hasta por encima de los 30 grados, han dado "el pistoletazo de salida" a la aparición de la plaga de procesionaria del pino (Thaumetopoea pityocampa).

Ante esta "alarmante situación", la asociación ha instado a las Administraciones locales a que contemplen entre sus "actuaciones imprescindibles" campañas de prevención anuales que se ejecuten en la temporada de otoño y que contribuyan a "minimizar los perjudiciales efectos de esta plaga".

Así se ha expresado el director general de esta ANECPLA, Jorge Galván, quien señala que, una vez se comprueba el adelanto de la plaga "debido a los efectos del cambio climático", resulta "imprescindible" que la población se adelante "a los peligros que puede llegar a ocasionar".

Plaga de procesionaria en la sierra El Cantalar entre los términos de Enguera y Anna

Plaga de procesionaria en la sierra El Cantalar entre los términos de Enguera y Anna / Agustí Perales Iborra