La Fe cuenta con la primera unidad de España de enfermería especializada en cirugías en que se paran el corazón o los pulmones

La conforman siete profesionales, cinco mujeres y dos hombres, que cuentan con un alto grado de especialización

La Fe cuenta con la primera unidad de enfermería especializada en cirugías en las que se detienen las funciones del corazón y pulmones.

La Fe cuenta con la primera unidad de enfermería especializada en cirugías en las que se detienen las funciones del corazón y pulmones. / GVA

Marina Bru

El Hospital La Fe cuenta con la primera unidad de perfusión de España; una especialidad del personal de enfermería necesaria en las cirugías en las que se han de paralizar las funciones del corazón o los pulmones. Se trata de un perfil profesional de alta especialización, que se integra dentro del área quirúrgica y que está conformada por siete profesionales, cinco enfermeras y dos enfermeros.

Estos profesionales se encargan de realizar la circulación extracorpórea y participan siempre que el paciente sea sometido a una intervención por lesiones cardiocirculatorias en la que sea necesario mantener y controlar la adecuada circulación de la sangre, y, por tanto, sustituir la función cardiaca o pulmonar -incluso ambas- durante la cirugía.

La coordinadora de la unidad, María José Puig, ha explicado que “la cirugía extracorpórea se ve influenciada por numerosos factores de riesgo y a la vez arroja gran cantidad de datos, tanto fisiológicos como técnicos, imposibles de manejar sin un tratamiento informático de los mismos. Somos los y las perfusionistas los encargados de gestionar, historiar y archivar la información”.

Operaciones de gran complejidad

“Contar con esta unidad específica es fundamental para dar respuesta al aumento del nivel de complejidad de las intervenciones que realizamos en un hospital como el nuestro, que siempre está entre los que más trasplantes de órganos realizamos en todo el país”, ha destacado el gerente de La Fe, José Luis Poveda.

Además de su participación en las operaciones en las que es necesaria la circulación extracorpórea, intervienen también en determinados tratamientos de quimioterapia localizada en tumores malignos y mantenimiento del soporte circulatorio en aquellos pacientes sometidos a trasplante pulmonar, cardiaco, hepático, procesos de donación en asistolia controlada cardiaca y no cardiaca y en determinadas intervenciones de neurocirugía.

Del mismo modo, las enfermeras perfusionistas asisten a los pacientes del programa de recuperación intensificada intervenidos en cirugía cardiaca, en el que se hace un seguimiento postquirúrgico de los pacientes atendidos.

Acreditación europea

Las enfermeras perfusionistas están obligadas a acreditarse a nivel europeo a través del European Board of Cardiovascular Perfusion y en España, solo hay un máster específico sobre perfusión de la Universitat de Barcelona y otro en la Universidad Autónoma de Madrid, ha señalado la directora enfermera de La Fe, Ana Regueira.

Además de la capacidad asistencial, este colectivo de enfermeras debe cumplir con otros requisitos de gestión y administración, tanto de recursos materiales como humanos. Así mismo, es fundamental la formación continuada, la docencia y la investigación, ya que la perfusión está en continua evolución como muchas otras ciencias.