El Guinness certifica que el árbol de Navidad de ganchillo de Vilamarxant es el más grande del mundo

El jurado ratifica que el abeto de croché, formado por unas 10.000 piezas, llega hasta los 23,5 metros de alto

120 mujeres y un hombre han tejido unas 10.000 piezas de lana para formar la estructura que ha adornado las fiestas en el municipio

Miembros del Guinness World Records visitan Vilamarxant para medir el árbol de Navidad de ganchillo

M. Á. Montesinos

Cèsar Garcia Aleixandre

Cèsar Garcia Aleixandre

El jurado del Guinness World Records ha certificado esta mañana que el árbol de Navidad de Vilamarxant hecho de ganchillo es el más grande del mundo. Desde las 11 horas, los miembros del prestigioso y antes conocido como Libro Guinness de los récords han medido el abeto desde su copa hasta la base y han suscrito que mide 23,5 metros de alto, según han confirmado desde el consistorio que preside Héctor Troyano, presente en la medición junto a Xavier Jorge, primer teniente alcalde y organizador el evento.

La expectación era máxima entre los vecinos y curiosos que seguían las mediciones del curioso árbol navideño que ha adornado las fiestas, a las puertas del ayuntamiento. Se ha necesitado una grúa para que uno de los medidores subiera hasta lo más alto y certificara que se han superado los 20 metros previstos inicialmente cuando surgió la idea tras las navidades de 2022. Un ingeniero ha avalado la medición y una experta en croché ha hecho lo mismo con el tipo de material empleado. Se han tejido unas 10.000 piezas desde marzo de 2022.

De esta forma tan original el municipio ha entrado dentro de las ciudades relevantes esta Navidad, bien sea por la decoración de sus calles, por el tamaño de su árbol navideño o por la iluminación extrema. En este caso, la localidad del Camp de Túria "ha plantado" el abeto más grande del mundo hecho con ganchillo, pero que también cuenta con fines solidarios y que se iluminó a principios de diciembre. La enorme estructura recubierta de lana encendía unas luces que daban la bienvenida, de forma oficial, a la Navidad.

Medición desde lo alto de una grúa

Medición desde lo alto de una grúa / Miguel Angel Montesinos

El éxito ha sido total hasta alcanzar el Guinness. El Ayuntamiento de Vilamarxant  y el grupo Cadeneta se pusieron manos a la obra y unieron sus fuerzas para crear el árbol de Navidad de ganchillo más alto del mundo en estas fiestas navideñas y de Reyes. Este proyecto se ha convertido en un gran reclamo turístico durante el pasado diciembre y en el principio de 2024.

El concejal y exalcalde Jorge, tras obtener la certificación del récord, ha declarado a Levante-EMV que "ha ido todo muy bien y el pueblo está muy orgulloso del éxito conseguido. Es un proyecto que ha unido a todo el pueblo por la ilusión que se ha creado y que finalmente ha logrado el Guinness".

Desde la organización se solicitó a la ciudadanía que colaborara activamente con la elaboración de cuadraditos de ganchillo, como ya sucediera en la edición de 2022, pero con el objetivo de construir el árbol navideño más alto del mundo. Tras la gran experiencia del año pasado en el que las vecinas y vecinos colaboraron de forma multitudinaria, el objetivo se convertía en más ambicioso y que ha cumplido el objetivo. Así, Vilamarxant se ha engalanado de una forma especial para vivir unas fiestas navideñas que serán inolvidables con un árbol único. Y más ahora que ha conseguido el récord mundial. El éxito ha sido posible a la labor de 120 mujeres y un hombre que han estado tejiendo durante muchos meses.

Una jurado observa los detalles de ganchillo

Una jurado observa los detalles de ganchillo / Miguel Angel Montesinos

La vertiente solidaria

Además, el árbol tiene una vertiente solidaria, ya que se ha podido diseñar y hacer gracias a los donativos de las personas participantes y que irán destinadas a la lucha contra el cáncer. De hecho, la propia Asociación de Lucha contra el Cáncer de la provincia así como el grupo Cadeneta han participado en la colecta de estos fondos que han permitido sufragar los trabajos para tejer el árbol, que comenzaron después de las Fallas de 2023.

Ya en marzo se había realizado la compra de lana y a partir de las fiestas josefinas se repartió el material entre las personas voluntarias que se presentaron para elaborar este árbol monumental, algo más de cien mujeres.

Medición en la base ante la mirada del jurado del Guinness

Medición en la base ante la mirada del jurado del Guinness / Miguel Angel Montesinos

Símbolo de reivindicación

El ganchillo se ha convertido en el símbolo de la reivindicación, como ya sucedió con la organización de la Serranía 'Hilando Vidas' por la visibilización de las mujeres rurales, encargadas de realizar el árbol de Navidad de ganchillo de Villar del Arzobispo del año pasado.