El Museo valenciano del Grabado y la Imprenta promovido por la asociación Amics de la Costera dentro del proceso de presupuestos participativos DecideiXàtiva (que se encuentra en plena fase de votación) no solo se nutriría del vasto catálogo de fondos que maneja el ayuntamiento. Aunque el resumen de los proyectos sometidos a consulta que ha difundido el consistorio reduce la propuesta del colectivo cultural a un «acuerdo de adquisición para la compra del Palau dels Sanç de Sorió» de la calle Montcada (señalado como posible emplazamiento del museo), lo cierto es que el fondo de la iniciativa de Amics va mucho má allá.
La asociación insta a la corporación municipal a no desperdiciar la oferta trasladada por un importante coleccionista privado que estaría dispuesto a ceder en depósito su colección de grabados antiguos si la ciudad aporta instalaciones dignas que sirvan de sede permanente. La propuesta se habría fraguado antes de las pasadas navidades y, hasta ahora, el Ayuntamiento de Xàtiva no ha dado una respuesta definitiva. El coleccionista ha hecho idéntico ofrecimiento a otras poblaciones. La Dirección General de Cultura y Patrimonio de la Generalitat también conoce el catálogo y podría estar dispuesta a ofrecer un immueble situado en València. «Nuestra ciudad podría hacer tarde y perdería una colección de grabado antiguo centrada principalmente en el grabado sobre metal del siglo XVI», alerta Amics de la Costera. El propietario ha manifestado en varias ocasiones que su principal propósito es la difusión de una de las disciplinas menos conocidas del arte, haciendo accesibles unas obras que, debido a su excepcionalidad y a las estrictas medidas que exige su conservación, rara vez se exhiben en público. La singularidad y la importancia de las piezas convierten a esta colección de grabado antiguo en una de las más destacadas de España, ya que atesora entre sus fondos un gran número de estampas de extraordinaria rareza correspondientes a eminentes artistas no representados en ninguna otra colección española.
Sus notables fondos de grabado renacentista alemán y flamenco-holandés son tan sólo comparables a los de las colecciones de la Biblioteca Nacional de España, según indican los responsables del colectivo de Xàtiva. El conjunto de estampas «es colección de referencia a nivel nacional para estudiar la obra de algunos artistas esenciales de la historia del grabado», como Lucas van Leyden, los Pequeños Maestros y los grabadores de Nuremberg de la generación posterior a Durero, así como los Hopfer de Augsburgo, inventores de la técnica del aguafuerte. Algunas partes de la colección ya han sido expuestas en los museos de bellas artes de Bilbao y Sevilla, y en Santander. Próximamente, se mostrarán en los espacios de la Nau de la Universidad de Valéncia.
Imprenta de Blai Bellver
«En vista del silencio municipal», Amics de la Costera decidió solicitar al consistorio que se inicien conversaciones para llegar a un acuerdo de adquisición con los propietarios del palacio de los Sanç de Sorió, en proceso de declararse Bien de Relevancia Local.
La asociación pide también que se encargue el proyecto técnico de rehabilitación que permita convertir el palacio en sede de un museo valenciano del grabado, que podría denominarse «Josep de Ribera» y albergar también los fondos de la antigua imprenta de Blai Bellver, aprovechando el legado de Xàtiva como cuna europea del papel.
Consciente de las dificultades financieras que comporta un proyecto de esta envergadura, la entidad cultural sugiere que el ayuntamiento entable conversaciones con la Direcció General de Patrimonio, la Diputació de València y la Fundació Hortensia Herrero.
Los dueños del Palau dels Sanç de Sorió han mostrado su predisposición a llegar a algún tipo de acuerdo con las autoridades municipales. En el proceso DecieiXàtiva, la propuesta del museo se condiciona a que haya encima de la mesa una oferta de cesión de uso o compra de la propiedad antes del 31 de mayo. El immueble conserva un interior gótico de gran valor, aunque muy deteriorado. «Por sus características, emplazamiento y dimensiones, el edificio podría ser un magnífico contenedor para usos culturales». Amics de la Costera propone su adquisición por compraventa o por cualquier otra modalidad de cesión, aunque no ve el emplazamiento irrenunciable y cree que también podrían sondearse espacios alternativos.
Otra cuestión nada baladí es que el Museo de la Imprenta que albergaba hasta ahora el monasterio de Santa María del Puig va a trasladarse a una nueva ubicación. El consistorio habría ofrecido Xàtiva como nuevo destino del mismo. Además, los propietarios de la antigua imprenta de Blai Bellver (la Biblioteca Municipal prevé conmemorar este año el bicentenario del nacimiento del impresor) conservan útiles, máquinas y elementos diversos —como los materiales xilográficos del siglo XIX— que enriquecerían las colecciones del futuro museo. Por su parte, el Museo de Bellas Artes de Xàtiva, instalado en la Casa de la Enseñanza, custodia la serie de grabados Desastres de la Guerra, de GoyaEstas piezas «deberían guardarse o exponerse en condiciones adecuadas para no deteriorarse», advierten desde Amics de la Costera.
