Vecinos de toda la Vall d´Albaida, de la Costera, la Safor o l´Alcoià acudían el pasado fin de semana a la Fira de Tendes, Tapes i Rock de Ontinyent. La séptima edición de la iniciativa impulsada por el ayuntamiento y el Consell Econòmic i Social (CES), con la colaboración de establecimientos de comercio y hostelería, así como asociaciones com Ahval, Comerç In y SOC, servía para atraer miles de personas desde el viernes y hasta el domingo, con un aspecto especialmente destacado este año: ha sido la edición con más asistencia de visitantes de otros municipios, según confirmaban los profesionales participantes al consistorio.

El concejal de Política Econòmica, Pablo Úbeda, destacaba que los participantes han remarcado que «la acogida ha sido buena y el balance de la feria ha sido positivo, pese a las precipitaciones intermitentes del sábado». Úbeda señalaba que el incremento de visitantes «constata que la difusión que hemos hecho ha sido la correcta y que seguimos avanzando como polo de atracción comercial y de ocio, gracias al trabajo conjunto que venimos haciendo con las asociaciones y profesionales, a los que agradecemos su implicación», resaltaba.

La VII Fira de Tendes, Tapes i Rock reunía este año 59 comercios y 12 establecimientos de hostelería, y actuaciones en directo de 7 grupos musicales. Se ha ampliado el espacio añadiendo el aparcamiento adyacente al colegio Martínez Valls, como ubicación para la zona de tapas, dejando la calle José Iranzo exclusivamente para las carpas de las tiendas.

Precisamente acerca del emplazamiento, el grupo municipal de Ciudadanos proponía ayer cambiar la ubicación de la Fira de Tendes, Tapes i Rock, planteando que la próxima edición se lleve a cabo en el recinto ferial.

Quejas de residentes José Iranzo

El portavoz de Cs, Juan Revert, manifestaba que la propuesta nace tras las quejas transmitidas por los vecinos de la calle José Iranzo, «que han visto como estos días se hacía muy difícil acceder a sus plazas de aparcamiento y a sus propias casas». Revert señalaba que cada año crece el número de participantes y asistentes y que «las asociaciones de comerciantes y de hosteleros, y el consistorio deberían plantearse el cambio de ubicación hacia el recinto ferial, que se encuentra a escasos 250 metros del lugar de celebración actual». «Existe un espacio perfectamente acondicionado para realizar este tipo de eventos sin tener que molestar a los vecinos que tienen sus casas y aparcamientos en José Iranzo, y sin tener que cortar calles esenciales para la circulación de la ciudad, como la avenida Albaida», añadía Revert.

Cs afirma que con el cambio de ubicación «ganaríamos todos: los comerciantes porque cuentan con un espacio más adecuado y con mayor capacidad; los visitantes por la comodidad del recinto; y los vecinos, que no tendrían problemas de circulación ni de acceso a sus viviendas». «Pensamos que esta Fira es una buena iniciativa, por el éxito de participantes y público, pero el recinto ferial sería el lugar más idóneo», concluía Juan Revert.