La policía mantiene el dispositivo de búsqueda del británico Mark Palmer, desaparecido hace diez días en Ontinyent. El joven de 32 años lleva cinco meses residiendo y trabajando en la capital de la Vall d'Albaida y desapareció el pasado 27 de abril. Ese día fue visto por última vez por un amigo, que dio la primera voz de alarma. El dispositivo de búsqueda, que a lo largo de estos días ha incluido a agentes de la Policía Local, Guardia Civil y Protección Civil, se mantiene pese a que no es la primera vez que Mark se marcha de casa sin dar noticias durante varios días. Desde su entorno alertan que podría estar pasando por una depresión.

Mark Palmer mide 1,78 metros y es de complexión delgada. Tiene el cabello pelirrojo, ojos color avellana y barba poblada, según los datos compartidos por familiares y amigos en redes sociales. La familia del desaparecido se ha trasladado a España desde Reino Unido, al no tener noticias de su paradero, y participan activamente en la búsqueda. El pasado sábado se coordinó un amplio dispositivo con agentes de la Guardia Civil y Protección Civil, con un helicóptero y una patrulla canina especializada en rastreo, pero no se halló al desaparecido. La búsqueda ha incluido la inspección de espacios, naves y edificios abandonados, así como los alrededores del río Clariano y parajes del diseminado. Estos días la búsqueda se ha ampliado a otros espacios de la capital de la Vall d'Albaida, aunque sin noticias positivas sobre el hallazgo del desaparecido.

Los familiares de Mark Palmer, muy preocupados al no tener conocimiento de su paradero, agradecen cualquier información y piden que si alguien tiene noticias de él, de su paradero o lo encuentra que se ponga inmediatamente en contacto con el 112.