Los robos en casas y casetas del diseminado de Canals se estaban convirtiendo este verano en una problemática demasiado habitual, a ojos de sus habitantes. Llegaron a formar, incluso, una patrulla vecinal ante el aumento de casos, para tratar de frenar el fenómeno reforzando la vigilancia de los caminos ante el paso de los ladrones. Ahora, el Ayuntamiento de Canals, ante las reclamaciones de la ciudadanía, también ha decidido pasar a la acción, asumiendo el papel de coordinador entre los vecinos afectados y las fuerzas de la autoridad mediante la creación de líneas de comunicación entre ambos actores, ciudadanía y agentes, para canalizar todo cuanto puedan aportar los primeros a la investigación de los casos ocurridos y a la prevención de nuevos. Además, según añadieron desde el consistorio, procurarán un seguimiento de los resultados de la medida, mediante la celebración de reuniones periódicas con representantes vecinales, de las fuerzas de seguridad y del mismo ayuntamiento.
Estas dos acciones municipales son el fruto de un primer encuentro, celebrado esta semana, entre la alcaldía de Canals y representantes de la zona del diseminado de Estepar-Vinyals. Mai Castells, alcaldesa del municipio, pudo conocer de primera mano el parecer vecinal al respecto de los robos en casetas y consensuó, junto a ellos, las medidas a llevar a cabo. «No hay que olvidar que estos casos son incumbencia de la Guardia Civil, la capacidad de acción de un ayuntamiento es limitada. Vimos que el mejor modo de ayudar era tratar de centrarnos en potenciar la comunicación entre las partes», explicó Castells.
De este modo, los vecinos de las distintas partes del diseminado de casetas y chalets de Canals deberán al representante de cada partida. Éstos se reunirán con el ayuntamiento y, «en las próximas semanas» según Castells, establecerán las vías de comunicación directa con el gobierno municipal y la Policía Local. Más adelante concertarán los encuentros periódicos para el seguimiento de la medida.
Por otro lado, el regidor Miquel Alventosa anunció que el consistorio de Canals se ha puesto en contacto con la estación depuradora de aguas residuales situada cerca del término municipal, para tratar de atajar los malos olores que los vecinos y vecinas del municipio han venido denunciando en las últimas semanas. «Nos han pedido que analicemos las zonas de Canals en las que se producen los malos olores, y las horas en las que ocurre, para comprobar qué está ocurriendo en la EDAR en esos momentos, para tratar de dar solución». Alventosa subrayó que en ningún caso se trata de gases nocivos.
