El Trasllat Extraordinari del Crist de l’Agonia ponía el sábado el punto álgido, junto con el concierto de Zoo (con dos sesiones) a los festejos extraordinarios celebrados en Ontinyent durante la que hubiera sido la Setmana Gran de los Moros i Cristians de la ciudad, fiestas suspendidas por segundo año consecutivo por la pandemia de la covid-19. Ontinyent acogía, así, una serie de actos organizados por la Societat de Festers del Santíssim Crist de l’Agonia con la colaboración del ayuntamiento, que también organizaba una programación complementaria con el ciclo «Ontinyent en concert», con actuaciones musicales y teatrales.
Tras concluir todos los actos, el alcalde, Jorge Rodríguez, hacía un balance «positivo, porque entre todos hemos podido sacar adelante las actividades previstas sin incidencias destacables. Lo más fácil hubiera sido no hacer nada, pero gracias al esfuerzo conjunto de muchas personas ha sido posible». Rodríguez agradecía el trabajo de las personas implicadas en los festejos extraordinarios que se han celebrado estos días.
Rodríguez también agradecía la labor de la Societat de Festers y de su presidente, Vicent Pla, que «ha hecho un gran esfuerzo organizativo en sus actos», afirmaba, así como de las diferentes concejalías implicadas, fuerzas y cuerpos de seguridad y policía local, personal de limpieza y voluntariado de protección civil. También ponía de relieve la «respuesta responsable y ejemplar» de la ciudadanía, «con un comportamiento que mayoritariamente ha sido ejemplar», aseguraba.
Por su parte, el presidente de Festers, Vicent Pla, también valoraba «muy positivamente» los festejos extraordinarios. Pla añadía que «han sido actos únicos e irrepetibles», y coincidía con el alcalde en resaltar la «buena actitud» de la ciudadanía, «que ha captado el mensaje, y no ha puesto en riesgo el trabajo realizado, como demuestra el hecho de que el Trasllat del Crist del sábado la gente se repartiera por toda la ciudad y no hubiera ninguna aglomeración por las calles». El presidente de Festers manifestaba que han sido «actos históricos por las circunstancias, que esperemos que sea un impass y que el próximo año podamos disfrutar de las fiestas tal y como las conocemos», concluía.
