Un lagarto Ocelado —conocido como «timon lepidus» en los círculos científicos— de dimensiones medianas fue puesto en libertad esta semana en una zona de vegetación alejada del casco urbano de Xàtiva por efectivos del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Vallada

El ejemplar se encontraba en buenas condiciones de salud y, tras ser revisado por un veterinario, se decidió que podía ser liberado en su hábitat natural. 

Así, los agentes liberaron y trasladado al lagarto Ocelado, un reptil que figura entre las especies protegidas del Anexo II del Convenio de Berna, y que apareció atrapado bajo unos palés de madera almacenados en una nave industrial emplazada en la capital de la Costera.

Las imágenes aportadas por la Benemérita dejan entrever que el reptil interceptado no ha llegado aún a su edad adulta, donde pueden alcanzar hasta los 60 centímetros de longitud —contando la cola— y un peso de más de medio kilo en los sujetos más grandes. 

Dimensiones «considerables»

Según informaron fuentes del instituto armado, la patrulla de la Guardia Civil de Vallada se personó en una de las naves industriales ubicadas en Xàtiva tras recibir el aviso de que un lagarto de unas dimensiones «considerables» se encontraba atrapado bajo unos palés de madera.

Los agentes, con la ayuda del personal de la empresa, procedieron a la retirada de los palés para poder rescatar al animal. 

Posteriormente, y tras consultar con expertos del Centro de Recuperación de Especies de El Saler, el reptil fue identificado como un Lagarto Ocelado, una especie protegida en los convenios internacionales.

Llamativos y de una notable envergadura, los ejemplares de esta especie suelen ser bastante esquivos, por lo que el operativo para su captura no debió ser fácil. España, Portugal, Francia e Italia son los países europeos en los que se distribuyen. Su presencia es habitual en ecosistemas mediterráneos, en su mayoría secos y pedregosos

Debido a las «buenas condiciones» que presentaba el animal y, tras las indicaciones del veterinario que lo examinó, el lagarto es puesto en libertad en su hábitat natural y en una zona alejada del casco urbano e industrial.

En el rescate intervinieron agentes del Seprona de la G. Civil de Vallada, así como el personal del Centro de Recuperación de Especies de El Saler en el asesoramiento a los efectivos.