Es una situación que se repite cada cierto tiempo en localidades de las tres provincias y que se suele agravar durante la temporada de verano. Efectivos de los parques de bomberos diseminados a lo largo y ancho de la Comunitat Valenciana han de acudir de noche —o bien pasada la madrugada— a polígonos industriales que normalmente están bastante separados del casco urbano de los municipios colindantes para sofocar un incendio en una nave sin uso o abandonada a su suerte.
Así ocurrió durante la madrugada del pasado jueves 14 al viernes 15 de julio, cuando hasta ocho dotaciones de bomberos pertenecientes a los parques de Alzira, Xàtiva, Ontinyent y Torrent —complementadas con voluntarios de Vallada— acudieron de madrugada hasta una nave industrial emplazada en Vallada para sofocar un incendio situado en una zona dedicada al almacenaje de muebles y materiales para la construcción de estos productos.
La parcela, ubicada en la calle de los Quintos de la localidad de la Costera, ardió de forma intensa durante toda la noche. Desde el Consorci de Bombers confirmaron ayer que se trata de «una antigua nave dedicada a mobiliario, que parece que ya no está en activo». La alta capacidad inflamable de los materiales causó que los profesionales de extinción movilizados tuvieran que extremar las precauciones, ya que en un incendio de estas características también se tiene que tener en cuenta que corre peligro la estructura del edificio afectado, situación que se agrava si se trata de un complejo sin actividad ni mantenimiento. De hecho, en las imágenes compartidas por el Consorci de Bombers se puede observar que el espacio prácticamente se quedó sin techo, ya que gran parte acabo desplomado.
Incendio «evolucionado»
Las mismas fuentes oficiales explicaron que una vez en el lugar de los hechos —los primeros avisos se recibieron a la 1:49 de la madrugada—, los profesionales de extinción movilizados hasta Vallada se encontraron con un incendio muy «evolucionado»: «Las llamas se habían propagado por buena parte de las instalaciones y los efectivos se centraron en la extinción y en evitar que se extendiera por otras naves próximas».
Las ocho dotaciones fueron coordinadas en Vallada por cuatro unidades de mando —concretamente sargento de Alzira, jefe de parque de zona, jefe de parque de bomberos voluntarios de Vallada y oficial de guardia— y se retiraron del polígono industrial pasadas las ocho de la mañana, por lo que el incendio estuvo activo durante más de seis horas.
Ahora, las principales tareas se centran en evaluar los daños causados e investigar las causas de lo sucedido para esclarecer el origen del foco de las llamas.
