Un nuevo 'bosque' con 176 árboles absorberá 137 toneladas de CO2 en Estubeny

Reducir la huella de carbono e impulsar la repoblación de una zona en peligro de deforestación. Con estos objetivos, una empresa dedicada a la transformación digital del sector del agua (Idrica), ha impulsado en Estubeny un nuevo 'bosque' formado por más de 176 árboles de especies autóctonas como la encina, el almez, el laurel, el pino carrasco, el aladierno o el algarrobo.

La iniciativa se enmarca dentro de la estrategia de Responsabilidad Social Corporativa desplegada por la compañía Fomento Urbano de Castellón, S.A, fundadora de Idrica. Invocando su "compromiso con la sostenibilidad", la multinacional decidió cambiar los clásicos regalos navideños a clientes y empresas socias por árboles, de modo que estos se convertían en padrinos de cada árbol.

De esta forma, cada "padrino" recibió un diploma personalizado que incluía la geolocalización del bosque, así como el dato de CO2 compensado.

Situado en Estubeny, el Bosque Idrica está plantado "bajos estrictos criterios medioambientales y científicos". Los 176 árboles instaurados permitirán compensar una huella de carbono que, en este caso, se ha estimado en 13,97 toneladas de CO2. Al mismo tiempo, según recalcan desde la compañía, se recupera un terreno degradado y se colabora con la recuperación de zonas en peligro de desforestación en España. 

Colaboración del ayuntamiento

Para llevar a cabo esta acción, Idrica ha contado con la colaboración de Bosquia, empresa responsable de proyectos de Responsabilidad Social Corporativa, junto con el Ayuntamiento de Estubeny, que ha adquirido el compromiso de mantener los árboles plantados durante un mínimo de 4 años, para así lograr el arraigo.

Esta acción se une a otras implementadas por Idrica, y que están íntimamente relacionadas con el compromiso con el entorno. Ejemplo de ello es la llevada a cabo con Asindown Valencia, y por la que la Fundación reconoció a Idrica como “Empresa Comprometida con la Inclusión Social”.