Medio Ambiente obliga a modificar la nueva línea eléctrica al polígono de Bocairent

La conselleria insta a buscar una alternativa fuera de las zonas con riesgo de inundación y que no afecte a los yacimientos arqueológicos de la zona

El Polígono El Regadiu de Bocairent.

El Polígono El Regadiu de Bocairent.

Sergio Gómez

Sergio Gómez

Un informe de la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental de la Conselleria de Medio Ambiente ha instado al Ayuntamiento de Bocairent a modificar el trazado de la línea aérea de media tensión de 3,3 kilómetros de longitud que promueve la corporación para paliar las carencias de suministro eléctrico en el polígono industrial Sector 3 tras advertir de que el proyecto entraría en conflicto con la normativa existente.

Concretamente, de acuerdo con el Patricova, 9 de las 23 torres previstas con la línea (situada al norte de la CV-81) atravesarían dos zonas afectadas por peligrosidad de inundación de nivel 6. Además, en las proximidades del trazado de la línea se ubican dos yacimientos arqueológicos incluidos en el inventario de la Dirección General de Patrimonio Cultural, por lo que sería necesaria una prospección de todo el ámbito de las obras.

Después de revisar la documentación presentada por el consistorio y otros informes de consulta en el marco de la tramitación por parte de la administración autonómica, que se alarga desde 2020, el estudio de impacto ambiental concluye que la actuación "podría tener efectos significativos sobre el medio ambiente", por lo que el proyecto deberá someterse a una evaluación de impacto ambiental ordinaria, al objeto de definir "una nueva alternativa con menor afección a zonas con riesgo de inundación" que "reduzca la potencial afección sobre los elementos de patrimonio cultural".

La inversión tiene por objeto reforzar el suministro eléctrico del polígono industrial, con problemas de abastecimiento energético y previsión de expansión, mediante la ejecución de una línea aéreo-subterránea desde el polígono industrial Los Olmos. Inicialmente, el tramo soterrado se preveía en una extensión de 70 metros en la recta final del trazado. Sin embargo, los informes remitidos en relación con la consulta realizada a la Dirección General de Medio Natural proponen que se valore el estudio de trazados alternativos que reduzcan la afección a terrenos naturales como el soterramiento completo de la línea, utilizando la vía de servicio de la carretera CV-81 y las calles de los polígonos industriales, una opción que sería sin embargo más cara.

Cuatro alternativas

El estudio de impacto presentado por el ayuntamiento analizaba hasta cuatro alternativas para la línea, ninguna de las cuales contemplaba el soterramiento completo de la línea. Una de ellas discure paralela a la CV-81 por terrenos agrícolas y parcelas de viviendas, descartándose debido a la problemaática generada por los numerosos cruzamientos y la imposibildiad de obtener permisos de paso. En las alternativas dos y tres, ambas alejadas de la CV-81, parte del trazado discure por terreno forestal estratégico, escogiéndose la opción que genera menor afección a zonas con masas arboladas o pies arbóreos.

El tramo de la línea situado al sur se adentra en el ámbito protegido de la Red Natura 2000, concretamente en la Zona de Especial Protección de Aves (ZEPA) Serres de Mariola y el Carrascal de la Font Roja, por lo que se debería dotar a las torres de media tensión de protección antielectrocuciones de acuerdo con la normativa. Los informes de Medio Natural señalan la presencia en la zona del proyecto del águila azor perdicera, en peligro de extinción, con una zona de nidificación a 4 kilómetros de distancia que, sin embargo, se estima que no se vería afectada por las obras.