El colegio de Bocairent se concentra por la paralización de las obras de la nueva escuela

Las familias y docentes denuncian las “malas condiciones” en las que se están prestando las clases y piden soluciones

El ayuntamiento espera la delegación de competencias de la conselleria para licitar el nuevo proyecto y desbloquear la situación

R.Tomàs.

La comunidad educativa del CEIP Lluís Vives de Bocairent se planta. La paralización de las obras de construcción del nuevo colegio, que comenzaron hace tres años, en 2020, ha movilizado a las familias, dirección y docentes del colegio y al ayuntamiento, que este viernes se han concentrado a las puertas del centro educativo para denunciar la situación y las “malas condiciones” en las que se están desarrollando las clases y reclamar soluciones. Las concentraciones se repetirán cada viernes a las 9 horas en el colegio hasta que obtengan una respuesta favorable a su reivindicación.

La asociación de madres y padres de los alumnos (AMPA) ha impulsado la medida de protesta ante una situación que califican de “insostenible” y “perjudicial” para sus hijos e hijas. Las obras de reforma y ampliación del CEIP Lluís Vives de Bocairent comenzaron en diciembre de 2020 y contemplaban dos fases de actuación: una para la construcción de un nuevo aulario de infantil y un nuevo comedor; y una segunda para la rehabilitación integral del edificio de primaria, la construcción de un gimnasio y la renovación de las pistas deportivas y el patio. Después de casi tres años de obras, solo se ha ejecutado la primera fase y está pendiente toda la segunda, dejando el edificio de primaria y el patio, que se han demolido en parte, inutilizables. El ayuntamiento rescindió el contrato el pasado mes de julio, por el retraso en la ejecución de los trabajos por parte de la empresa adjudicataria, que no iba a cumplir el plazo previsto de finalización de las obras para este curso 2023-2024, y desde entonces la actuación está parada.

Protesta en el colegio Lluís Vives de Bocairent

Perales Iborra

Edificación del nuevo aulario de infantil del colegio de Bocairent.

Edificación del nuevo aulario de infantil del colegio de Bocairent. / Perales Iborra

Los alumnos de primaria están desde hace dos años en aulas prefabricadas instaladas en la zona infantil, en una situación que tenía que ser “provisional”, por un año, mientras se ejecutaban las obras en el edificio de primaria. Pero los continuos retrasos mantienen al alumnado más tiempo de lo previsto en unos “barracones” que no reúnen las condiciones adecuadas para la docencia y, además, con pésimas condiciones climáticas, sufriendo los alumnos frío en invierno y calor en verano, denuncian las familias. La situación es aún peor, ya que con el estado de las obras, el alumnado de primaria se ha quedado sin patio para realizar Educación Física -tampoco tienen gimnasio-, y tienen que hacerlo en un mínimo espacio abierto que queda entre el aulario de infantil y el antiguo edificio de primaria, denuncia el AMPA, que señala que este espacio tampoco está acondicionado. Además, el recinto se ha quedado sin una zona de sombra. Las familias y los profesores denuncian que el alumnado de las prefabricadas “no tienen aula de informática, ni de música. No es un espacio acondicionado para la docencia”, expresaban en la concentración a las puertas del colegio algunos maestros y padres, que también evidenciaban que los alumnos “no tienen espacio para realizar Educación Física en condiciones, hay peligro de caer con las piedras que hay”. Los concentrados reclaman “celeridad a todos los estamentos públicos, porque se está perjudicando a los niños y niñas”. Una maestra apuntaba que “llevamos muchos años sufriendo esta situación. El aulario de infantil no está acabado del todo, hay desperfectos, y no hay derecho a que pasemos por segunda vez por esta situación”, lamentaba. Las familias y el colegio piden “que nos escuchen, que nos hagan caso, porque es el futuro de nuestros alumnos”.

Alumnos de primaria accediendo a las aulas prefabricadas, este viernes.

Alumnos de primaria accediendo a las aulas prefabricadas, este viernes. / PERALES IBORRA

A la concentración se sumó el concejal Ximo Carbonell, en representación del ayuntamiento, que explicó que “estamos trabajando para que la obra se licite lo más pronto posible. Estamos pendientes de una reunión con la conselleria que aclare la situación y que vaya lo más rápido posible”. Carbonell también mostró su apoyo a las familias y al colegio, afirmando que “comprendemos que no es una situación agradable, y que es necesario y de extrema urgencia por la situación de la escuela”.

La AMPA, el colegio y el ayuntamiento han iniciado la protesta, que se mantendrá cada viernes, “para reivindicar que nos den una solución”, afirman desde la asociación de madres y padres. Reconocen que es un “problema cuya resolución depende de otras administraciones, que alguien de arriba, de conselleria [forma parte del Pla Edificant de la Conselleria d’Educació], haga algo por desbloquear la situación y reactivar el proyecto”. Las familias lamentan que “el nuevo colegio tenía que estar listo para este curso y no estará. Tampoco sabemos cuando se acabará”, una incertidumbre que ha motivado que se movilicen para reclamar “soluciones”.

Reunión próximo lunes

El alcalde de Bocairent, Xavier Molina, ha avanzado a este diario que el próximo lunes hay prevista una reunión entre representantes del ayuntamiento y de la Conselleria d’Educació para abordar el problema. Molina ha detallado que el pasado 19 de septiembre se reunió con la Dirección de Infraestructuras Educativas, que pidió documentación del nuevo proyecto, que el consistorio facilitó inmediatamente para avanzar en la tramitación. El primer edil afirma que desde esa dirección autonómica “se comprometieron a llevar adelante el proyecto”. Molina apunta que “estamos pendientes de que la conselleria vuelva a delegar las competencias en el ayuntamiento para la licitación del nuevo proyecto y disponga el presupuesto necesario para lo que resta de la obra. Estamos a la espera de ello”, apunta el alcalde.

Xavier Molina también ha mostrado su apoyo a la comunidad educativa del colegio, “somos conscientes de la situación, que además de las molestias y la incomodidad que sufren, se agrava al ver que la obra está parada”. El alcalde manifiesta “estamos trabajando con la conselleria” para desbloquear la situación y confía que “la administración autonómica sea sensible ante la situación que se está viviendo”. 

Edificio de primaria del CEIP Lluís Vives de Bocairent, pendiente de ser rehabilitado.

Edificio de primaria del CEIP Lluís Vives de Bocairent, pendiente de ser rehabilitado. / PERALES IBORRA