El fútbol despide al chellino Rafael Granero, histórico exjugador del Espanyol

La muerte del exjugador profesional de fútbol Rafael Granero Bellver ha desatado un aluvión de mensajes de condolencias en el mundo del fútbol. Nacido en Chella en 1945, Granero despuntó como centrocampista y desplegó la mayor parte de su trayectoria en el RCD Espanyol, equipo donde dejó huella tras disputar 162 partidos, la mayoría en Primera División, así como dos competiciones europeas.

El chellino llegó al club perico en 1965, cuando apenas tenía 20 años, después de un breve paso por el Badalona, donde recaló procedente del Club Esportiu Júpiter, equipo fundado el 1909 en el barrio de Poblenou que milita en la Primera Catalana y donde el futbolista se formó en las categorías inferiores.

Aunque posteriormente fue cedido al Real Sporting de Gijón, Granero apenas permaneció una temporada en el club asturiano (la 1967-68), donde jugó 22 partidos a las órdenes de Galarraga y dejó buenas sensaciones como lateral, alternando las dos bandas.

El futbolista regresó a las filas del RCD Espanyol en 1968 y continuó vistiendo la camiseta blanquiazul hasta la temporada 1977, cuando regresó al CE Júpiter para retirarse un año después, en 1978. Posteriormente, también ejerció como secretario técnico y entrenador en el CE Europa, club vinculado al barrio de Gràcia de Barcelona.

Después de conocerse el fallecimiento de Rafael Granero el día de Reyes, la directiva del Espanyol declaró el luto oficial de todo el club y expresó su pesar y su reconocimiento hacia el jugador, que permaneció 12 temporadas en el equipo y coincidió con la emblemática delantera blanquiazul conocida como "Los cinco delfines", formada por Carmelo Amas, Marcial Pina, Cayetano Re, José María Rodilla y José María García Lavilla.

Antes del último partido de Copa del Rey que esta semana disputó el Espanyol ante el Getafe, en el Stage Front Stadium de Cornellà se guardó un minuto de silencio en memoria del exfutbolista de Chella, que pasó sus últimos días en la residencia de Anna, y dio su último suspiro pocos días después de la muerte de su hermana.