El declive demográfico se agrava en la Costera y la Vall con 700 muertes más que nacimientos

Ambas comarcas registran el peor saldo vegetativo desde que hay registros y Cerdà es el único municipio que suma más altas que bajas

Xàtiva marca una cifra histórica de fallecidos, mientras que Ontinyent es la localidad con el mayor déficit poblacional 

Gente paseando por las calles de Xàtiva.

Gente paseando por las calles de Xàtiva. / Perale Iborra

Sergio Gómez

Sergio Gómez

Si no fuera por los flujos migratorios, el futuro de muchos municipios en riesgo de despoblación estaría pendiendo de un hilo mucho más fino. La brecha entre defunciones y nacimientos se ha ensanchado en solo un año un 27% en la Costera y la Vall d'Albaida hasta dejar en 2022 el peor saldo vegetativo desde que existen registros históricos por comarcas, iniciados hace 17 años.

Los últimos datos manejados por el Instituto Valenciano Estadística (IVE) reflejan la realidad de una herida que no deja de sangrar: ambos territorios contabilizaron en 2022 casi 700 muertos más que recién nacidos con residencia en el territorio. En 2021, un año antes, la diferencia entre ambos indicadores fue inferior, con la pérdida de 582 personas no reemplazadas por otras. En 2020, el déficit poblacional fue de 565 personas.

En el último año computado, la Costera registró 315 fallecidos más que bebés alumbrados en virtud de unas tasas de 6,75 nacimientos y 10,77 defunciones por cada 1.000 habitantes, que arrojan un crecimiento natural del -4 por mil. En la Vall d'Albaida, en cambio, hubo 315 muertes (10,32 por cada 1.000 habitantes) más que recién nacidos (6,51 por cada 1.000 habitantes), el equivalente a una tasa negativa del -3,82 por mil.

La Canal de Navarrés volvió a situarse en 2022 entre las comarcas valencianas con el peor saldo vegetativo (-9,09) al presentar solo 5,2 nacimientos frente a 14,29 defunciones por cada 1.000 habitantes. Sin embargo, este territorio ha mejorado sus datos en el último balance después de recortar la diferencia entre ambos indicadores, con 129 muertos más que recién nacidos frente a los déficits de 2020 y 2021, que superaban las 150 personas.

Lo cierto es solo uno de los 61 municipios que conforman el ámbito geográfico de la Costera, la Canal y la Vall d'Albaida experimentó un crecimiento natural del número de habitantes en 2022. Se trata de Cerdà, donde nacieron 5 personas y murieron 2. En Aielo de Rugat, Carrícola y Llocnou d'en Fenollet se contabilizó una cifra de decesos idéntica a las de alumbramientos, mientras que en las restantes 57 localidades de las tres comarcas el balance fue negativo .

En el reverso de la moneda, Ontinyent es el municipio con el saldo más negativo tras computar 329 fallecidos y 221 recién nacidos, una diferencia de 108 personas. Aunque la natalidad ha estado por debajo del dato de 2022 en años anteriores, si se mira la vista atrás el número de alumbramientos en la capital de la Vall se ha desplomado a la mitad desde 2006, cuando se contabilizaron 428. En la serie histórica que comienza en 2005, Ontinyent solo anotó más fallecimientos en 2020, el año de la pandemia, con 352.

En Xàtiva se registraron en 2022 un total de 210 nacimientos y 297 defunciones, un saldo negativo de 87 personas. Aunque hubo una veintena de nacimientos más que en 2021, los fallecidos aumentaron en similar proporción hasta sumar un máximo sin precedentes en lo que va de siglo.

La cifra de nacimientos se ha desplomado a la mitad desde 2006 en Ontinyent

Canals es la tercera localidad peor parada en el recuento de altas y bajas, con 62 fallecidos más que nacidos (se fueron 159 y llegaron al mundo 97). Pese a no seguir el orden en cuanto a población en el ámbito de las tres comarcas, Enguera ocupa la cuarta posición en la clasificación, con 45 defunciones más que alumbramientos (se contabilizaron 74 de los primeros y 29 de los segundos). En Moixent, el saldo negativo se acerca a las 40 personas (20 nacidos y 58 muertos), mientras que Benigànim acaricia las 28 bajas más que altas (69 fallecidos por 41 nacimientos).

Los migrantes salvan las cifras del padrón

Pese a tener más habitantes, l'Olleria maquilló su balance con 21 decesos más que recién nacidos, cifra idéntica a la registrada en la Pobla del Duc. L'Alcúdia de Crespins, la Llosa de Ranes, Anna, Llutxent, Albaida y Chella cerraron el año con cerca de una veintena de vecinos desaparecidos más que nacidos.

Aunque la última revisión del padrón de habitantes mostró un incremento poblacional de 1.250 personas residentes en la Costera, la Canal y la Vall d'Albaida, un crecimiento que responde exclusivamente a la llegada coyuntural de nuevos residentes procedentes de otros países y municipios. El declive demográfico sigue siendo un hecho incontestable que se afianza en el territorio. 

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