El trabajo invisible de la mujer rural en la Vall d'Albaida

Las desigualdades entre hombres y mujeres siguen patentes en el mundo laboral, aunque hace años eran aún más acusadas. En una época en la que la mujer no podía trabajar y estaba relegaba a las tareas domésticas y el cuidado de los hijos, muchas mujeres realizaron trabajos en casa, trabajos de economía sumergida, un trabajo oculto y muy mal remunerado, con condiciones laborales pésimas, incluso denunciables. Una situación que, especialmente en el mundo rural, se ha alargado durante muchos años, todavía persisten, aunque en casos más residuales. Unos trabajos «de puertas adentro» que ha quedado registrados en un documental producido por el Institut d’Estudis de la Vall d’Albaida (IEVA) y que se presenta el próximo viernes 9 de febrero a las 19:30 horas en el Auditori Municipal de Benigànim. 

«De portes endins. Dones, vida i treball a la Vall d’Albaida» muestra ese trabajo de las mujeres en la industria sumergida en la Vall d’Albaida, una comarca donde el tejido industrial tiene un peso determinante en la economía de la zona. El documental expone ese trabajo «invisible, de puertas adentro, trabajo que realizaban las mujeres en casa y que tenían que compaginar con sus labores de amas de casa y cuidado de los hijos. Un trabajo que les permitía ganar un sueldo, que complementaba al del marido», explica Lluïsa Gallego, una de las guionistas del documental, junto a Mariola Montosa. Gallego remarca que «eran trabajos no reconocidos, sin contrato, en negro». El audiovisual, realizado por Anmorsígol, muestra estos trabajos a partir de una serie de entrevistas con once mujeres de la Vall d’Albaida. 

En una comarca con una industria textil muy potente, las mujeres tenían oportunidad de realizar varios trabajos de ámbito textil en casa, como repuntadoras, confeccionando sábanas o toallas, en el filat o cordó. La industria del cirio también ha estado muy presente, sobre todo en Albaida, donde las mujeres han trabajado en casa decorando los cirios. En esta localidad, algunas también han podido desarrollar trabajos en casa haciendo fregonas para limpiar. Otras han tenido una fuente de ingresos económicos forrando garrafas de vidrio, un material con una industria destacada en l’Olleria. Y el campo, la agricultura, y los trabajos artesanales también han contado con la mano de obra de la mujer, en la «vara», con la preparación de varas o ramas para empeltar; en la confección de alpargatas de esparto o embogar sillas de enea.

Una gran variedad de trabajos que los responsables del documental han tenido que acotar, dejando algunos de ellos fuera de la película. «Algunos trabajos han quedado fuera, como el del cirio, pero el documental muestra una buena representación del trabajo de la mujer», remarca Lluïsa Gallego. Así, «De portes endins. Dones, vida i treball a la Vall d’Albaida», recoge los testimonios de mujeres de Alfarrasí y Montaverner que trabajaban en el textil, en el conocido como «el fardo», en el que se les llevaba a casa un manojo anudado de prendas textiles, que ellas repuntaban y devolvían con el trabajo hecho. También aparecen mujeres que se dedicaban a forrar garrafas de vidrio, con vímet y plástico, de l’Olleria y Benigànim, y de esta última localidad también se muestra el ejemplo de una mujer que hace espardenyes de esparto. Otros testimonios son el de una mujer que se dedicaba a embogar sillas, una que hacía fregonas y otra de Aielo de Malferit que se dedicaba a «la vara». Gallego señala que el contacto con estas mujeres ha sido posible con la colaboración de asociaciones de mujeres que realizan una gran labor en la comarca, como el colectivo Malva. 

Entre las entrevistadas, todas ellas mujeres jubiladas, a excepción de la que se dedica a la confección de zapatillas de esparto, que heredó la empresa de sus padres, destacan la dureza de un trabajo para el que tenían que trazarse «un buen sistema de organización, ya que lo tenían que compaginar con las labores de casa y el cuidado de los hijos y de los mayores», pero que les permitía «ingresar algo de dinero en casa, que iba bien para destinarlo a los hijos, a los estudios de los hijos», remarca la guionista del documental. Unos trabajos con «horarios duros, que tenían que hacer a ratos, de noche o cuando los niños estaban en el colegio», apunta Gallego, que también pone de manifiesto que eran trabajos sin descanso. «Estaban todo el día, a ratos, pero todo el día, y toda la semana. Sin vacaciones, muchas de ellas dicen que tras dejar estos trabajos, tras jubilarse, es cuando han podido disfrutar de unas vacaciones». 

Acciones del IEVA sobre el papel de la mujer

El documental da continuidad a una iniciativa del IEVA dedicada al estudio y difusión del papel de la mujer en la Vall d’Albaida, que se inició en 2018 con un ciclo de conferencias y mesas redondas bajo el título de «Pas de Dona». Siguió en 2019 con la exposición itinerante «Petjades de dona» y en 2021 con el documental «Dones al pas», que mostraba un diálogo intergeneracional, entre mujeres mayores y jóvenes, para evidenciar las diferencias entre ellas a nivel social, laboral, familiar y de relaciones. Ahora, llega un nuevo documental que saca a la luz la participación de la mujer en el mundo rural. Un trabajo audiovisual que «quiere mostrar a las generaciones más jóvenes la vida de las abuelas que tuvieron que hacer frente a la dureza de una vida laboral que se compaginaba con el peso de las labores de la casa y el cuidado de los hijos o mayores», recalcan.

El IEVA pone de manifiesto que «De portes endins. Dones, vida i treball a la Vall d’Albaida» es un documental que «habla de los trabajos que tradicionalmente han hecho en casa las mujeres de nuestra comarca, algunos de ellos con técnicas artesanales y tradicionales en desuso o transformados; faenas que implicaban un gran esfuerzo personal para aportar ingresos económicos a la familia, generalmente en el ámbito de la economía sumergida y sin ningún reconocimiento social». Un reconocimiento que llega ahora con este documental.

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