El observatorio forestal de la Font adelanta su apertura ante el riesgo de incendios

La falta de precipitaciones y las elevadas temperaturas en los meses de otoño e invierno, a causa del cambio climático, han “desestacionalizado” los incendios forestales, que ahora ya no se concentran tanto en los meses estivales y se están produciendo grandes fuegos “fuera de temporada”, en meses de otoño o invierno, cuando antes eran menos habituales. El incendio de Montitxelvo en noviembre pasado, que arrasó unas 2.500 hectáreas, es una buena muestra de ello. La situación motiva que las medidas de prevención se avancen y ante ello la Generalitat Valenciana ha adelantado la apertura de observatorios forestales distribuidos por el territorio, como el que se encuentra en el monte del Capurutxo de la Font de la Figuera, que anticipa su apertura al próximo 1 de marzo, según han informado desde la Dirección General de Prevención de Incendios Forestales de la Conselleria de Justicia e Interior.

El observatorio forestal de la Font de la Figuera es uno de los once de la Comunitat Valenciana que adelantan su apertura a febrero y marzo ante la ausencia de precipitaciones y la altas temperaturas de los últimos meses, que suponen también un riesgo elevado de incendios por la falta de humedad de la vegetación forestal, explican.

Así, el observatorio forestal forestal ubicado en el cerro del Capurutxo, una montaña de 936 metros de altura en el término de la Font de la Figuera, abrirá el próximo 1 de marzo y se unirá a los observatorio que permanecen abiertos durante todo el año, unas instalaciones atendidas por vigilantes forestales que permiten la detectar los incendios forestales más pronto y con ello actuar frente a su expansión y evitar peores daños.

Estos observatorios están ubicados en posiciones geográficas privilegiadas para controlar grandes superficies de terreno. El de la Font de la Figuera se encuentra en el monte del Capurutxo, con una altura de 936 metros, lo que permite otear términos de varias localidades de la Costera, la Vall d’Albaida y la Canal de Navarrés, así como de la vecina comunidad de Castilla La Mancha, con términos próximos como el de Almansa. Los vigilantes que operan e estos observatorios forestales pueden detectar un incendio que aún está en su fase inicial, a muchos kilómetros de distancia, y avisar a los medios de extinción para evitar su propagación y que las labores de extinción lleguen lo antes posible, lo que puede contribuir notablemente a contener el incendio. Los vigilantes detectan antes los posibles fuegos y pueden informar sobre la ubicación del incendio. También se encargan de transmitir la información generada por los distintos medios de prevención de incendios forestales entre sí y con la central de prevención de incendios, destacan desde la conselleria, que también ponen de manifiesto que los vigilantes de estos observatorios recogen datos meteorológicos y los transmiten, hacen seguimiento de tormentas y ubicación de posibles caídas de rayos. Además, también ofrecen apoyo en las tareas de seguimiento de un incendio forestal.

Por todo ello, y ante las circunstancias climáticas adversas de estos meses, se ha avanzado la apertura de los observatorios forestales. Además del de la Font de la Figuera, también han adelantado su actividad, en este caso al 15 de febrero, los de Reclot en Monóvar, Aixortà en Castell de Guadalest y Serrella en Quatretondeta. Por su parte, los de Las Hierbas en Chiva, la torre de vigilancia de Turmell en Xert, Sierra del Ave en Dos Aguas, Cerro Simón en Andilla, Alto de Alcola en Cofrentes y Besori en Llombai abrieron el pasado 5 de febrero. El observatorio del Maigmó, en Tibi, abrirá también el próximo 1 de marzo, como el de la Font.

66 observatorios en la Comunitat Valenciana

Estos once observatorio que avanzan su apertura, se unen a los 30 que están abiertos durante todo el año. En la Comunitat Valenciana existen 66 observatorios que forman una red de vigilancia forestal que se comunica con las centrales de prevención de incendios forestales provinciales. Cuando detectan los focos de incendio, comunican a las centrales la aparición de un humo y su localización aproximada. La superficie forestal de la Comunitat Valenciana abarca, actualmente, 1,3 millones de hectáreas, lo que supone que el 56% de la superficie del territorio autonómico es terreno forestal. Esta superficie, además, va en aumento cada año, debido al abandono de superficies de cultivos agrícolas y a la colonización de éstas por especies forestales. Ante ello, la Generalitat Valenciana expone que la “necesidad de apostar por la prevención y gestión forestal es una área prioritaria”.  

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