«Podria parecer que pasó en la Tierra Medina de Tolkien o en los 7 reinos de Juego de Tronos, pero passó en la Marca Hispànica, una tierra de leyenda». De esta manera tan reconocible con las series televisivas de éxito, presenta Juan Francisco Ferrándiz (Concentaina, 1971) su última novela La tierra maldita, que se pone hoy a la venta tanto en su versión en castellano en la editorial Grijalbo, como en valenciano La terra maleïda (Rosa dels Vents).

Ferrándiz sigue con el relato histórico y ahora escribe una crónica épica en la Barcelona medieval del siglo IX. Con una carta de presentación de uno de los mejores escritores de novela histórica, Ildefonso Falcones. «Una recreación espléndida de una épica oscura marcada por cruentas luchas de poder», según el autor de La catedral del mar.

En el siglo IX, Barcelona estaba gobernanda por los francos desde la distancia, una ciudad de apenas mil quinientas almas asolada por los intentos de conquista de los sarracenos. A esa tierra maldita llega el joven obispo Frodolí, ercién nombrado para el cargo por el rey franco. Así arranca la novela.

«Con la escrupulosidad y la imaginación de los grandes narradores, Juan Francisco Ferrándiznos traslada a una época oscura, a una ciudad vencida que apenas conserva su dignidad y a la lucha de unos hombres y mujeres que se dejaron el alma por conseguir la libertad y la prosperidad de lo que entonces era, para todos, una tierra maldita», reza la sinopsis del libro.

Abogado y escritor

Juan Francisco Ferrándiz cursó estudios de Derecho y ejerce en la actualidad como abogado, una actividad que combina con una de su grandes pasiones, la literatura. Su primera novela, Secretum templi, fue escrita en valenciano.

Ferrándiz se dio a conocer al gran público en 2012 con la publicación de su segunda novela, Las horas oscuras, sobre la leyenda del monje valeroso llamado Brian de Liébana en Irlanda, con la que consiguió un excelente resultado.

El escritor valenciano consolidó en 2015 su prestigio dentro del género de la novela histórica con La llama de la sabiduría, obra donde recrea con maestría la Valencia del siglo XV, con una interesante reivindicación del papel de la mujer como transmisora y guardiana del concimiento.

Ferrándiz vuelve con su solvencia en los hechos y en relato, con la intención que La tierra maldita sea una de las novelas del año.