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Entrevista

Gorka Urbizu: "Cada vez nos cuesta más afrontar el siguiente paso artístico"

El líder de Berri Txarrak visita la sala Moon de València con su banda

Gorka Urbizu: "Cada vez nos cuesta más afrontar el siguiente paso artístico"

Hace semanas que Berri Txarrak agotó las entradas para su concierto de este viernes en la sala Moon de València, por lo que decidieron celebrar otro concierto al día siguiente en el mismo lugar, también en vías de «sold out». Hablamos con su líder, Gorka Urbizu del pasado y presente de la banda y de su no-futuro más inmediato. «Creo que es importante dejarlo en un buen momento como éste, y no obligado porque la gente ya no te escucha o porque estás enfadado con tus compañeros», explica.

Hace cinco años celebraban su 20 aniversario y ahora están de gira de despedida. ¿Qué ha pasado en este tiempo?

Por una parte está el desgaste. Yo llevo 25 años en la banda, tirando del carro, haciendo un trabajo extramusical que acaba minando. Cada vez nos cuesta más afrontar el siguiente paso artístico, dar con un concepto, componer el disco, grabarlo... Es un proceso que supone muchísimo esfuezo porque no hacemos discos por hacer. Y por otra parte hay una pulsión artística de parar este proyecto para seguir haciendo otras cosas.

¿Seguirá entonces «acariciando la guitarra» como canta en «Katedral bat»?

Claro, porque por encima de todo están las ganas de crear. Éste ha sido y está siendo un viaje alucinante, hemos trabajado con productores a los que admirábamos, tocado en ciudades que no conocíamos. Nuestra historia ha sido como la materialización del milagro del rock, algo casi anacrónico en estos tiempos.

¿Y cuando pasan cosas como llenar dos días una sala de València se replantea la decisión?

En esta gira vamos a pasar por muchos estados de ánimo, y uno de ellos va a ser la pena. Me he hecho la pregunta mil veces porque hemos conseguido lo que todo el mundo anhela, vivir de la música haciendo rock a nuestra manera. Pero vivimos una época en la que todo va deprisa, y se nos ha olvidado lo que cuesta esto. Recuerdo los primeros conciertos que dimos, por ejemplo, en l'Eliana, que tocábamos ante 40 personas. Si entonces hubiéramos buscado el «like» inmediato no hubiéramos llegado hasta aquí.

Yo recuerdo uno de esos conciertos en l'Eliana. Y también el de hace unos años con llenazo en la Rambleta.

Sí, ese fue superespecial. Es importante no olvidar de dónde vienes y quién apostaba por ti en los principios, cuando no todo era de color de rosa. Normalmente de València me acuerdo mucho, porque al principio no solíamos salir del País Vasco y València era uno de los primeros sitios donde nos dieron la oportunidad de tocar.

¿Se reconoce usted en el Gorka de los inicios?

Es como cuando ves una foto antigua. Te reconoces, la esencia sigue, el espíritu es el mismo, pero ahora tenemos más experiencia y, no es que seamos Steve Vai, pero tocamos mejor. Cuando empiezas tienes una inocencia impagable que te hace intentarlo todo de cualquier manera. Eso es algo que echo de menos en la escena actual.

Han tocado en el Hellfest, en el Primavera, en el Viña, en la Kursaal. ¿Cuál de todos es su público?

Eso es algo que mucha gente no ha entendido. Con los años hemos ido ampliando nuestra paleta de sonidos, aunque al final lo que importa es tener buenas canciones. Yo, como fan de la música, estaba tocando en el Viña y veía el cartel del Primavera y me decía: joder, hay mogollón de bandas que me flipan, ¿porque no puede estar Berri ahí? Los prejuicios estilísticos o la ortodoxia sólo te llevan a perderte muy buena música, que la hay en todos los estilos. Y eso lo hemos tenido claro desde el minuto uno.

¿Que el 95 % del Estado no entienda sus letras les ha perjudicado? Lo digo por los que alguna vez les han incluido como «banda radical» supongo que por cantar fuerte y en euskera.

Para nosotros las letras son muy importantes y le dedicamos mucho esfuerzo. Así que si entiendes el euskera la experiencia «berri» se multiplica. Ante eso no puedes hacer nada, pero está la fuerza del directo y la actitud, que es lo que más importa. Cantamos en euskera porque es uno de nuestros dos idiomas y simplemente nos salió.

¿Cuál es el «Infrasoniuak» («Infrasonido») oculto por los smart phones y los peinados neonazis de los futbolistas al que dedican su último disco?

Es una analogía de la gente que intenta ser escuchada y que tiene que hacer el triple de ruido para que se le atienda, la gente que está en las escuelas o en los lugares de trabajo. El artista tiene que reflejar la sociedad en la que vive.

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