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Carmen Mola | Escritores

"Mucho ha de cambiar el canon de la crítica para que entremos en la posteridad"

Los ganadores del Premio Planeta defienden la «mirada de género y feminista» de «La bestia»

Jorge Díaz. G.caballero

Hace cosa de un mes la concesión del premio Planeta a Carmen Mola por ‘La bestia’ sacudió al normalmente aburrido panorama literario español. El galardón, dotado con un millón de euros, permitió descubrir quién estaba tras un seudónimo que en muy poco tiempo se había afianzado como uno de los nombres clave del thriller en España.

Resultó que Carmen Mola -hasta ese día, profesora de instituto y madre de familia- era en verdad tres hombres, guionistas los tres y novelistas por separado, llamados Jorge Díaz, Agustín Martínez y Antonio Mercero. No fueron pocas las voces que criticaron su «oportunismo» por haberse parapetado tras un nombre de mujer para empatizar con el mayoritario público femenino y por mostrar poco respeto por todas las escritoras que han tenido que ocultarse a lo largo del siglos tras un seudónimo masculino para poder ejercer.

«Está muy bien que se haya generado un debate, que de pronto se esté hablando de un libro y de tres escritores en lugar de por si fue o no penalti la jugada de anoche», explicaba ayer uno de los tres «Mola», Antonio Mercero, en visita promocional a València. «Usar un seudónimo es algo arraigadísimo en el tiempo y nosotros escogimos uno porque somos tres autores y es hasta feo poner los tres nombres en la portada. Respetamos la opinión de todos pero no me entra en la cabeza que alguien pudiera pensar que escogimos ese seudónimo con algún ánimo revanchista o torticero».

«De cualquier manera -añade su compañero Jorge Díaz-, conforme pasan los días y se empieza a hablar de la novela, nos vamos dando cuenta de que aquello de que el feminismo se ha puesto en contra de nosotros no ha pasado realmente. Es solo un sector del feminismo el que se ha puesto en contra. Hay mujeres feministas que nos están hablando maravillas de la novela y que nos dicen que incluso tiene una mirada de género, que es feminista».

Una novela más ambiciosa

¿Valía un millón de euros descubrir el secreto de Carmen Mola? Primero de todo, Mercero recuerda que, cuando ellos se presentaron al premio, este estaba dotado aún con 600.000 y que el incremento se decidió el día anterior al del fallo. «Pero más que por el dinero, que siempre viene bien, lo hicimos porque era la ocasión idónea para salir, con mucho aparato eléctrico -justifica-. Ya que íbamos a descubrir nuestra personalidad, que fuera en un sitio relevante. Y más relevante que el Planeta, no se nos ocurre nada».

Cabe recordar que, cuando nació en 2017 con ‘La novia gitana’, Carmen Mola no vino al mundo sola y desnuda. Lo hizo bajo el paraguas de una importante campaña de marketing a cargo de su editorial, Alfaguara, y pronto logró una popularidad que la acompañó en sus siguientes lanzamientos: ‘La red púrpura’ y ‘La nena’. Las tres novelas protagonizadas por la inspectora Elena Blanco se acogían a la moda del thriller efectivo y truculento que frecuentan otros «best sellers» patrios como Juan Gómez Jurado o foráneos como Pierre Lamaitre.

Para optar al Planeta con su siguiente trabajo, los Mola se mantuvieron en el género con el que ya habían triunfado pero rebajando los toques «gore» y ambientándolo en un pasado -el Madrid del siglo XIX- que les permitía dar una patina historicista y cierto costumbrismo galdosiano a su historia. «’La bestia’ es una novela más ambiciosa que las otras y por eso puede parecer una Carmen Mola diferente -acepta Mercero-. Es más compleja, tiene más fondo social, un reflejo de las condiciones de la mujer, del Madrid de esa época… Es más amplia, con más calado literario».

Madrid violento y pandémico

Desde el primer momento, la novela ganadora del Planeta busca generar un impacto en el lector describiendo la imagen de un perro que juega con la cabeza de una niña. El Madrid del verano de 1834 en el que transcurre ‘La bestia’ es una ciudad violenta y asolada por una epidemia de cólera y en constante tensión porque nadie sabe bien cómo se contagia la enfermedad. En medio del caos, aparecen desmembrados varios cadáveres de niñas y los rumores dibujan a un ser monstruoso (la bestia) como responsable del horror.

Este argumento se sustenta, en mayor o menor medida, en ingredientes de casi todos los géneros que han vendido millones de libros en los últimos tiempos: el thriller, la novela histórica, la naturalista, la conspiracionista, la sobrenatural, la romántica incluso... Pero sus autores niegan poseer o seguir la fórmula del perfecto «best seller». «Es que no existe esa fórmula -asegura Agustín Martínez-. Pensar que juntando elementos se consigue un éxito asegurado es el primer error. Lo importante es que la historia interese y te la creas, y a partir de ahí entretener a la gente». Y Díaz añade: «La única fórmula es no aburrir, eso es fundamental. El problema es que es muy difícil ponerla en práctica».

Lo que sí han puesto en práctica son sus conocimientos como guionistas de series exitosas como «Hospital central» (Díaz y Mercero) o «La Caza» (Martínez), y no solo para lograr ese ritmo folletinesco de capítulos cuyo final obliga a pasar al siguiente. «Nuestra formación de guionistas nos ha domesticado el ego -apunta Mercero-. A todos nos han tirado guiones a la basura, nos han dicho esto es una puta mierda, vuelve a escribirlo… Aprendes a buscar solo lo mejor sobre la historia, no a imponerte tú. Eso ayuda a que el trío funcione». «El talento es contagioso -le completa Jorge Díaz-. Ahí tienes un titular».

Ante todo, diversión

Pese a que el argumento nos lleva al Madrid de hace casi 200 años, ‘La bestia’ toca una serie de temas que podrían haber situado sin problema el relato en el presente: una pandemia que las autoridades no saben cómo afrontar, una sociedad en la que ricos y pobres cada vez viven más separados, y unas chicas jóvenes que han de tener miedo a salir de casa solas y que, encima, tienen que sentirse culpables por ello…

Aun haciéndolo con ropajes del siglo XIX, Díaz confirma que ha habido por parte de los «Mola» una intención de tocar asuntos contemporáneos e incluso, supone el escritor, darle una lectura política propia del siglo XXI a los enfrentamientos entre isabelinos y carlistas que aparecen en el libro. «La lucha entre el progreso y el conservadurismo absoluto sigue existiendo -apunta-. Ahora quizá lo llamamos de otra manera y dentro de cien años se dirá de otra porque seguirá existiendo. En España siempre ha habido un enfrentamiento muy duro entre tradición y progreso».

Pero tras esta reflexión, rápidamente vuelven los tres «Mola» a defender que ‘La bestia’ es una novela de «entretenimiento», puro género. «Queremos reivindicar la novela como diversión», proclama Jorge Díaz. «No tenemos ningún afán de posteridad porque ningún escritor puede controlar sin dentro de unos años sus novelas le seguirán leyendo o serán papel reciclado», añade Martínez. «Mucho tendría que cambiar el canon de la crítica para entrar en la posteridad -reconoce Mercero-. Pero quizá cambie y el thriller deje de verse por encima del hombro».

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