Rigoberta Bandini fue la gran triunfadora de la noche al liderar las votaciones de la segunda semifinal del Benidorm Fest. La cantante fue la primera en clasificarse para la final de este sábado junto a Rayden, Xeinn y Gonzalo Hermida. Quedaron fuera Marta Sango, Sara Deop y Javiera Mena. 

Xeinn, el exconcursante de «Got talent», interpretó «Eco» con una puesta en escena basada en el juego de luces y el color azulado. 

Marta Sango, la «extriunfita» andaluza, defendió «Sigues en mi mente», con una puesta en escena futurista que recordó a una astronauta en pleno frenesí de los años 70. Aunque los nervios traicionaron a la cantante. Desafinó en los primeros segundos de su canción. 

La rave llegó con la actuación de Javiera Mena. La chilena interpretó «Culpa» rodeada de bailarinas y luces de neón. La propia artista definió su actuación como una «epilepsia bollera» a causa de su pertenencia al colectivo LGTBI y a los neones, símbolos de la Ruta del Bakalao. Tenía razón. Su actuación se convirtió efectivamente en un baile sensual entre una dominatrix, ella, y sus siervas. 

Gonzalo Hermida participó en la segunda semifinal desde su habitación en el hotel Don Pancho, tras haber dado positivo en coronavirus hace días. Cuando le tocó el turno a Hermida se emitió el videoclip de «Quién lo diría», su propuesta para Eurovisión, que convenció tanto al jurado como al público. La clasificación fue la gran sorpresa de la noche, que logró vencer las barreras del espectáculo eurovisivo posicionándose como finalista sin actuar en el plató.

Al fin le tocó el turno a Rigoberta Bandini, la gran favorita del certamen junto a Tanxugueiras. La cantante barcelonesa se presentó en el escenario con un vestido de época blanco, como el que llevaban las mujeres al parir. Como una novia, Rigoberta entonó «Ay mama» con un velo sobre la cabeza. Siguió cantando al lado de su prima, quien le acompaña siempre sobre el escenario. En el momento álgido de la canción, apareció una Falla con la forma de un globo terráqueo, pero en lugar de países, este planeta tenía carne y un pezón. 

Ya lo avisó la artista días antes. Su intención era llevar «una teta enorme» a Eurovisión, y por ahora, la ha llevado al Benidorm Fest. Bandini también se atrevió a utilizar fotografías de su propio embarazo -estuvo en estado hace un año- durante su actuación. El público se puso en pie, a bailar, algo que no pasó en la primera semifinal.

Tras el momentazo de Rigoberta, le tocó el turno a Rayden, que defendió «Calle de la llorería» junto a una banda de músicos. Sara Deop finalizó la ronda de candidatos «Make you say», la propuesta más sensual. 

Las actuaciones sorpresa de la noche fueron las de Ruth Lorenzo, representante de España en Eurovisión 2014, que interpretó «Bailar pegados», de Sergio Dalma. También actuó la banda madrileña Niña Polaca. 

Inés Hernand revalidó su título como nueva sensación televisiva en la segunda semifinal. La joven eclipsó a Alaska y Màxim Huerta, aunque estos veteranos de la televisión estuvieron más sueltos que el pasado miércoles. 

El sábado será la gran final del certamen, donde se enfrentarán Rigoberta Bandini, Xeinn, Gonazalo Hermida, Rayden, Tanxugueiras, Chanel, Blanca Paloma y Varry Brava.