Cada vez corren más. Cuantitativa, pero también cualitativamente. Uno de los aspectos que llamó la atención en la Carrera de la Mujer de Valencia celebrada ayer ya no fue las miles de corredoras, los mensajes, la marea rosa o el entusiasmo general. Eso ya va de serie. Este año, lo que sí que dio la sensación es que la «Carrera» es cada vez más «Carrera» y menos «Marcha». No debe extrañar: cada vez hay más carreras y cada vez participan más mujeres. Por eso, el ritmo del gran pelotón es cada vez mayor. El «seis minutos por kilómetro» se sume con más naturalidad. Por supuesto, la Carrera de la Mujer es, sobre todo, una fiesta deportiva, como es, por ejemplo, la Volta a Peu. Y lo importante es, precisamente, su labor social: la capacidad para generar amistades, quedadas, grupos de trabajo y excusas para encontrarse satisfecha de una misma. 11124 entraron en meta, varios cientos más que el año pasado porque la preuba sigue creciendo.
Mujeres de todas las edades, muchísimas niñas, y numerosas personas mayores. Y lo más importante, los gestos de satisfacción al entrar en la meta por el objetivo cumplido.
La primera entre miles fue Natacha López. Una justa recompensa para alguien que ha hecho de la carrera a pie una profesión de fe. En esta ocasión, la atleta de Cárnicas Serrano no corrió con su marido, su habitual compañero en las grandes citas. En esta ocasión, él esperaba con los dos hijos, Andrea y Zlatan (con éste último en la barriga, aún corría con ocho meses de embarazo), junto al hotel las Arenas, a falta de tres kilómetros. La atleta de Cárnicas Serrano es de las habituales en los primeros puestos de carreras populares. Ausentes algunas de las de gran elite (Isabel Checa, Raquel Landín, Marta Esteban?), Natacha puso un mundo sobre el resto, ganando con mucha comodidad. Por detrás entraría Lucía Picazo, que vino desde atrás a superar a Claudia Sanz y Raquel Almiñana.
Y muchas más
Lo más asombroso de la jornada es que, además de las más de once mil finalistas de esta carrera, otras casi ocho mil estuvieron presentes en la Cursa de la Dona Delikia de Gandia.
Pero hay más heroínas. Por ejemplo, 40 mujeres participaron en el MaMoVa. El maratón de montaña de La Pobleta-Andilla, la gran prueba de este tipo. Y en el que ilvia Miralles (Mur i Castell) estableció un nuevo récord con 4:44:15, once minutos por debajo de la marca anterior. 58más corrieron el medio maratón y también Vanesa Benavent (CA Correliana) batió el récord de la prueba. Manuel Segarra y Álex Marín fueron los ganadores respectivamente.
Los chicos tuvieron una cita importante con el campeonato de España en ruta de 10 kilómetros, donde hubo un protagonismo especial con el Cárnicas Serrano: su activo más importante, Nacho Cáceres, se alzaba con el subcampeonato en categoría absoluta. David Aparicio y Emilia García ganaron la carrera de Sant Vicent de Lliria.
El próximo fin de semana ya pueden correr todos juntos. El calendario se llena, incluyendo carreras del Circuito de la Diputación (Puerto de Sagunto) y Divina Pastora Seguros de Valencia (Carrera Redolat).
