El País Vasco registra uno de los mayores índices de lectores de prensa de Europa. Es raro el bar de Donostia que no disponga de ejemplares de toda la prensa escrita que allí se edita. Son miles los domicilios donde el diario escrito queda depositado en su buzón a primera hora de la mañana. Es una de sus formas de vida.

Uno de sus periódicos referenciales publicaba ayer, a cinco columnas, página izquierda : «La Euskal Selekzioa accede a otro universo de la pelota a mano». No se puede explicar mejor el significado de todo lo que ha acontecido este pasado fin de semana a los pies del Monte Aituxri o en los valles de la sierra de Aralar.

Y es que, por vez primera en la larga historia de la pelota vasca, las gentes de aquellos hermosos lugares han descubierto que en otros territorios europeos como los de La Picardía, Flandes, Walonia, el Piamonte o la Liguria y los Andes hay jóvenes pelotaris que, como los de los valles del Oria o del Bidasoa, golpean la pelota con la mano para sentirse albaceas como ya hacían sus abuelos. Muchas de aquellas gentes saben que en Valencia también se juega con una «pelotita» pero desconocían que, precisamente los valencianos eran los más decididos impulsores de un movimiento que hoy aglutina a países de Europa, América y Asia y que, con la mentalidad mediterránea, abre sus horizontes para seguir incorporando adhesiones.

La que se oficializó el pasado sábado ante todos los principales medios informativos de prensa, radio y televisión de Euskadi adquiere una dimensión especial, de categoría histórica. Se incorpora uno de los pueblos europeos con mayor índice de lectores de prensa y el que con más cariño trata esta seña de identidad. Han sido artífices de este encuentro en el «otro universo», los presidentes Patxi Jaúregui, por parte de la Federación de Euskadi de Pelota Vasca y José Daniel Sanjúan, presidente de la Federació de Pilota Valenciana y de la Confederación Internacional. Ambos, así lo afirman: «siempre tuvimos claro que lo importante era el juego de pelota». Ambos han tenido que comparecer ante una gran cantidad de medios informativos para dar cuenta de este proceso que ha tenido sus dificultades, incluso sus zancadillas pero que ha acabado con una respuesta «unánime»de todos los países representados en la Confederación. Y la mejor prueba, la comparecencia de su comisión ejecutiva al completo ante los medios de información, escoltados por las banderas de cada uno de los países que la integran. José Daniel Sanjuán se calaba la «txapela» de campeón.