La tragedia ha vuelto a golpear al deporte aficionado en la Comunitat Valenciana. Si otras veces ha sido a las carreras populares, en esta ocasión ha llegado al fútbol. Emilio Costa, un vecino de Bellreguard, de 54 años, falleció ayer cuando jugaba un partido con la peña «Matalaf», un equipo de aficionados del que formaba parte desde hacía varios años.
El encuentro se disputaba en el campo municipal de Almoines, un municipio próximo al del fallecido, ambos en la comarca de la Safor.
Según narraron a Levante-EMV varios testigos, en un momento del juego, el hombre pidió el cambio por otro compañero de equipo, no porque se sintiera mal sino porque era algo habitual cuando se juntaba a jugar la peña cada domingo ir cambiándose para descansar y de ese modo poder jugar todos. Otras fuentes apuntan que se dolía de la pierna. Ya en la banda, y sin tiempo a decir nada, se desplomó en el suelo quedando inconsciente.
Rápidamente, y al ver que no respondía, los compañeros llamaron al 112. Hasta el campo de fútbol se desplazó primero el Policía Local de Almoines, que durante varios minutos le practicó maniobras de reanimación. Las fuentes apuntan que incluso en algún momento llegó a volver en sí, pero volvió a desmayarse minutos después.
Cuando llegaron los servicios sanitarios no pudieron más que certificar la muerte del hombre. El cuerpo fue posteriormente trasladado hasta el anatómico forense de Valencia, donde se le realizará la autopsia para determinar las causas de la muerte.
El fallecimiento de Emilio Costa ha conmocionado a la comarca de la Safor.
Era un hombre muy implicado en el equipo de fútbol de la peña Matalaf y, según quienes le conocían, no sufría ninguna enfermedad que hiciera prever tan fatal desenlace..
Según ha podido saber este periódico, Emilio trabajaba en un banco y era padre de dos hijos. Era también uno de los habituales de la peña. Este equipo alquilaba cada semana el campo de fútbol de Almoines para disputar sus encuentros. La muerte le sobrevino alrededor de las 8.30 de la mañana.
En diciembre del año pasado, un joven atleta de 26 años de Ontinyent fallecía en su casa mientras se duchaba. En abril de este año fallecían dos hombres mientras disputaban el Maratón Vías Verdes de Ojos Negros, en la provincia de Castelló.
