«A mi el Valencia me ficha de centrocampista, yo no era defensa. En Benimar jugaba de centrocampista, pero en el 79 llegó un día Pasieguito y me dijo ‘usted el domingo va a jugar de líbero, y hasta aquí», dice Arias, que mira a Claramunt y dice «seguro que cuando Pepe me vio aparecer seguro que dijo ‘un xiquet jove, este me retirarà’» pero Claramunt sigue tan serio como siempre, y va directo al fútbol: «Jugar de libre entonces era más fácil que jugar en el medio del campo porque los rivales no los tenías tan encima y tenías más tiempo para pensar la jugada, podías desplazar el balón más fácil y salir de atrás. Lo único es que tenías el compromiso de ir a los cruces y ahí no podías fallar porque si lo hacías eras hombre muerto, y además se notaba más el fallo. El libre si fallaba ya solo quedaba el mano a mano con el portero». El encuentro se produjo ayer durante la presentación de Libre, el libro autobiográfico de Ricardo Arias escrito por el periodista Fran Guaita.

¿Pero qué tenía Pepe Claramunt para que Arias, el gran libre de la historia del Valencia CF, quisiera ser centrocampista? «Es que cuando yo le veo él está en su apogeo, que fue cuando ganaron la liga del 71. Tenía esa capacidad de mando y jerarquía, tenía un carisma especial y cuando todos tenían el balón buscaban a Pepe ».

La pregunta sin irresistible. ¿Ese compromiso es justo lo que necesitan los jugadores del Valencia CF actual? El Libre sigue tan listo como siempre, mira al periodista y sonríe, «ya nos has llevado a dónde tú querías…». Pues sí, para qué engañarnos. Como la pregunta es sana y los dos así lo entienden, se arrancan sin miedo. Pepe da una lección de amor propio que bien podría colgar Javi Gracia en las paredes del vestuario: «En estos momentos difíciles es cuando un jugador que quiere ser algo lo tiene que afrontar. Sabes que vas a tener broncas y pitos, pero si quieres ser algo... Lo dije en unas declaraciones a favor de Carlos Soler. Si uno quiere ser algo, cuando las cosas están difíciles es cuando tiene que hacerse importante. Saldrá o no saldrá, pero tú pon interés que al final sale». Arias le da la razón: «Es que además son ellos los que lo tienen que solucionar. Los ex jugadores ya no jugamos, los periodistas tampoco, ni la afición, ni el entrenador...».

Libre ya está a la venta en las principales librerías.