La exigencia de Peter Lim de cobrarse los préstamos de 38 y 16,5 millones repectivamente, que vencen en septiembre de este año, asfixia el calendario de pagos acumulados del Valencia CF de cara a este verano y que ascienden a 121,7 millones de euros. Además de los 54 millones que hay que devolver a Meriton Holdings, en agosto de 2021 el club de Mestalla debe abonar los 35 millones de euros de la mitad de las fichas de la primera plantilla de la temporada actual. Por otro lado, a 30 de junio hay que sumar los 16 millones de la cuota anual de Bankia (cuyo importe el año pasado pudo ser respondido con el préstamo de 16,5 millones de Meriton). Por otro lado, se deben atender los 16,22 millones de los pagarés a los que se recurrió para pagar las fichas de los jugadores de junio pasado y cuyo vencimiento tiene fecha límite en diciembre.

Cabe recordar que en su presupuesto el Valencia estimó unas pérdidas de 26.431.000 euros. Sin embargo, incluso cumpliendo el presupuesto y dando por hecho que se lograse beneficio cero, con las perspectivas de ingresos actuales, el Valencia puede tener severas dificultades para atender en el corto plazo, según los expertos consultados por este periódico. El escenario es idóneo para que Lim puede ejecutar la garantía de cobro de los dos préstamos con la venta de hasta ocho futbolistas de la primera plantilla.

Se da la circunstancia de que Peter Lim, en su condición de máximo accionista y acreedor, dio el visto bueno a la ampliación por un año del préstamo de 38 millones y aprobó otro préstamo de 16,5 millones con un año de vencimiento (y el aval de otros cuatro jugadores), a pesar de que el mismo Valencia CF ya reconocía a fecha de 30 de septiembre que la actual situación, derivada de la crisis del covid-19, no permite cuantificar las pérdidas. Tanto en la nota 15 de su memoria, en el apartado de Hechos Posteriores al Cierre, al igual que en su informe de gestión, se manifiesta que no se puede proyectar «de forma fiable» una estimación «cuantificada» de los «potenciales impactos en el próximo ejercicio, dado lo incierto de la evolución de la misma». Sin poder calcular el alcance total del perjuicio que la crisis del coronavirus puede provocar en las cuentas, Lim tensó los pagos a corto plazo con el vencimiento de los préstamos a un año vista. Además, el presidente Anil Murthy dejó claro en la última Junta que si el Valencia no atiende los pagos, Lim tiene decidido ejecutar los avales: «Será el club quien decidirá cuándo y por cuánto se venden (los jugadores), pero en esos importes de la venta irían destinados a pagar los préstamos vencidos. Lo único que ha hecho Meriton es ejercer su derecho de recuperación».

Los préstamos de Lim asfixian los pagos

Hay que recordar, que los 38 millones del primer préstamo proceden del dinero que utilizó el Valencia de la línea de crédito de 100 millones que Lim otorgó en el año 2015. Los 62 millones restantes se capitalizaron. De la línea de crédito B, 80 millones, Lim apartó 38 millones para capitalizar por valor de 100 junto a los 62 millones del crédito A. Los otros 42 millones de cancelaron sin que el Valencia los utilizara. En la línea A, Lim incluyó los derechos de cuatro futbolistas más el 20% de los derechos de TV. Se establecieron avales que garantizaran un retorno «factible», a diferencia de otras hipotecas, como la de los dos estadios o la ciudad deportiva. Una práctica que repitió cuando inyectó 16,5 millones el pasado verano, añadiendo otros cuatro jugadores.

Además de los compromisos presupuestados, hay que hacer frente a deudas a corto plazo recogidas en el balance a 30 de junio de 2020, y que incluyen deudas con entidades deportivas e intermediarios (61 millones) y deudas por los terrenos del Nuevo Mestalla (2,7 millones).

El escenario decisivo e incierto de los próximos meses se encuentra entre las tareas que deberá despachar Anil Murthy en su audiencia con Peter Lim. El presidente del club de Mestalla espera encerrado en un hotel de Singapur a que pasen las dos semanas de cuarentena antes de rendir cuentas ante el máximo accionista, al que no ve en persona desde antes del estallido de la pandemia. Los temas a tratar no serán solo económicos. En la última semana, la popularidad de Meriton ha caído en picado con una crisis que, desde las protestas y acciones legales de los grupos de oposición del entorno valencianista, ha logrado calar en la prensa internacional. Una herida en el orgullo personal de Peter Lim, que ha hecho ostentación de las amistades que le ha granjeado el fútbol, como las leyendas del Manchester United, y que ha visto en los últimos días los análisis demoledores de medios como el New York Times, When Saturday Comes o Eurosport, a los que ayer se añadió The Guardian.