Complicaciones extra para el Valencia Basket de cara al importante encuentro de mañana en Moscú. Y es que aunque parecía que Bojan Dubljevic iba a poder participar en este encuentro sin mayores problemas, el golpe que sufrió en el dedo corazón de la mano derecha en el partido ante el Fenerbahçe podría hacerle perderse la importante cita ante el Khimki.

«Aún no ha podido entrenar y es seria duda para el partido. No sabemos aún si podrá viajar. No es una lesión grave, pero es que aún no puede coger el balón, y si no puede coger el balón no puede jugar», explicó Jaume Ponsarnau. El técnico taronja también confirmó que Martín Hermannsson «está totalmente recuperado del hombro» y que aunque el martes «se dio un golpe en un encontronazo con Tobey y tiene seis puntos de sutura en la ceja», no tendrá problemas para jugar.

Por otra parte, y tras lo sucedido el domingo en San Sebastián, dijo que en estos días «el equipo ha respondido con buena mentalidad al trabajo, centrados, comprometidos... La gente está buscando sus sensaciones con trabajo, que es el camino. Ahí estoy positivo, el equipo está dando buenas respuestas y esperamos que nos sirva». Es por ello que el preparador de Tàrrega huye de las cábalas y no quiere ir más allá de este encuentro. «Mis cuentas son ganar al Khimki porque para encontrar el máximo enfoque y motivación hacia el partido es mejor no hacer cuentas. Es un partido muy importante y también lo serán el resto. Hay que hacer todo lo posible para ganar», concluyó.

Guillem Vives, ya recuperado para la causa tras más de mes y medio alejado de las pistas por una lumbalgia aguda, confesó que aún necesita «tiempo. Me costó un poco entrar en partido el domingo. Necesito esta semana para coger sensaciones», dijo.