Novak Djokovic pone patas arriba el US Open: ahora quiere cambiar las reglas del tenis

El serbio ya es oficiosamente el nuevo número 1 del tenis mundial tras su última victoria en el US Open

Novak Djokovic habla durante el US Open y lanza una propuesta que podría cambiar las reglas del tenis.

Novak Djokovic habla durante el US Open y lanza una propuesta que podría cambiar las reglas del tenis.

El oficioso nuevo número 1 del tenis mundial, Novak Djokovic, quiere revolucionar el deporte en el que reina. O, al menos, quiere intentarlo.

Así se desprende de la propuesta que ha lanzado en el US Open tras conseguir el acceso a la segunda ronda del torneo al vencer a Bernabé Zapata. Su planteamiento cambiaría las reglas del tenis, por lo que se prevé que no esté exento de polémica y genere cierta controversia.

Qué quiere Novak Djokovic

En la actualidad, el tenista, cuando está compitiendo, está solo en la pista y debe valerse de sus propios recursos para salvar el partido. Sin embargo, Novak Djokovic quiere cambiar esto y que los entrenadores se involucren más con los deportistas.

Anteriormente, los preparadores no podían ni siquiera hablar con sus pupilos, pero ahora ya pueden comunicarse con los tenistas sin problema, algo que Novak Djokovic considera "genial" porque ya "no hay que estar pendientes de si el juez de silla te ve y te sanciona", pero aún insuficiente.

Por eso, ha puesto una propuesta revolucionaria sobre la mesa: que los entrenadores pudieran bajar incluso a la pista para hablar con sus protegidos o que ambos pudiesen mantener una comunicación constante a través de auriculares.

"Honestamente, me gustaría que se implantara la opción de que los entrenadores bajaran a la pista en algunos descansos para hablar con su jugador, o que nos comunicáramos por auriculares. Sería muy bueno para el público y para el jugador".

Novak Djokovic, tras ganar un punto en el US Open.

Novak Djokovic, tras ganar un punto en el US Open.

Novak Djokovic tiene claro que su propuesta puede no ser bien acogida por muchos aficionados o profesionales del tenis, pero mantiene que la idea no restaría individualidad y lucha personal a este deporte, porque los tenistas todavía tendrían que "resolver los problemas por sí mismos".

Sin embargo, si se aceptase este cambio, a su juicio sería beneficioso para todas las partes implicadas, "público y jugador", ya que no restaría vistosidad ni épica al tenis. Eso "seguiría así por mucho que hable el entrenador", afirma el campeón.