El valenciano Schareina ilusiona en el Dakar

El Dakar 2024 ya está en marcha. Un exigente prólogo disputado en Al-Ula sobre 27 kilómetros cronometrados y otros 130 de enlace abrió ayer la carrera y sirvió para establecer el orden de salida de la primera etapa, pero sobre todo, empezó a poner el foco en los favoritos de las distintas categorías. El talentoso Tosha Schareina, piloto valenciano de origen alemán, que ha ‘heredado’ la Honda oficial de Joan Barreda, comenzó con inmejorables sensaciones y fue el más rápido en este primer día de acción, que aunque no contaba para la clasificación general, sí le permitió elegir posición estratégica para hoy. De paso, lanzó un primer aviso a sus directos rivales, incluídos sus compañeros en la poderosa estructura del Monster Energy Team, que cuentan con la última versión de la moto de Honda a diferencia del español.

Schareina arrancó segundo y marcó la primera referencia del día en Arabia Saudí, con casi medio minuto de diferencia sobre todo un campeón del mundo y ganador del Dakar como Sam Sunderland. No se hizo ilusiones, porque aún quedaban por llegar a meta la mayoría de los favoritos, como el defensor de la corona, Kevin Benavides, o el vigente campeón del mundo, su hermano, Luciano. Ninguno de ellos pudo batir al valenciano, que terminó al frente, con 12 segundos de ventaja sobre Daniel Sanders (GasGas) y 19 sobre Ross Branch (Hero) y dejó a 24” a su compañero Adrien Van Beveren, cuarto.

Después de diez años en Honda, Joan Barreda empezó su aventura en Hero con caída nada más arrancar. El de Torreblanca, que tiene prácticamente decidido que ésta sea su última aparición en el rally después de catorce ediciones, aspira a despedirse en el podio y a mejorar su palmarés de triunfos de etapa: suma 29, a solo 4 del rércord absoluto. Por fortuna, el susto en el prólogo no tuvo consecuencias y pudo concluir en el top 15, a 1’25” del tiempo de Schareina. El tercer español, Lorenzo Santolino, se situó 12º para empezar. «La verdad es que me sentí muy cómodo. Fue un prólogo mucho más largo de lo que estamos acostrumbrados, con 27 kilómetros cien poor cien arena y con mucha más navegación, pero pude amarrar esa primera posición», resumió Schareina, prudente después un debut ilusionante: «La carrera de verdad empieza con la primera etapa y va a ser un Dakar muy, muy duro. Hay que tener los pies en la tierra, sabiendo que hemos de estar concentrados al máximo», zanjó.

En coches, Audi arrancó al frente, pero esta vez el protagonismo no fue para Carlos Sainz ni Stephane Peterhansel, sus dos primeros ‘espadas’, que estuvieron más bien discretos en el prólogo . Su compañero, el sueco Mattias Ekström fue quien llevó la voz cantante y ‘voló’ a bordo del prototipo RS Q e-tron impulsado por energía eléctrica, en el que con el que Audi busca hacer historia en la que previsiblemente será su despedida del rally.“No hemos hecho un buen trabajo. El plan era acabar el 15 o así, y la verdad es que no ha salido bien. Nos hemos perdido en una zona y hemos parado antes de la llegada. Nos hemos equivocado en un cálculo porque pensábamos que habíamos perdido menos tiempo”, reconoció Sainz al final de la especial, que completó a 2’18 del vencedor. Nada que el madrileño, triple ganador del Dakar, no pueda solventar.

Tampoco se lució Nasser Al-Attiyah, campeón las dos últimas ediciones. El qatarí ha cerrado su etapa con Toyota y busca el que sería su tercer título consecutivo (sexto en total) con el Hunter y Prrodrive, en un año de transición a la espera de materializar su debut con Dacia en 2025. Este viernes cometió un pequeño error de navegación en un cruce, sin consecuencias en la general.