Supercopa de España: mucho más que un título

El Barça y el Real Madrid juegan esta noche la final de la Supercopa de España en Riad. El Al-Awwal Park será el escenario de un nuevo clásico, repetición de la final del pasado año, jugada también en Riad y que acabó con victoria azulgrana (3-1) en el mejor partido del equipo azulgrana desde que Xavi es el inquilino de su banquillo.

Precisamente aquel partido está sirviendo de referencia a ambos técnicos para preparar la final de esta noche. Xavi ya ha explicado a sus hombres que aquel partido es el camino. También los primeros 60 minutos del último clásico jugado en Montjuïc, que acabó ganando el Real Madrid con dos goles de Bellingham, pero en el que los azulgranas fueron superiores durante una hora.

Se trata de tener el balón, de quitárselo a los de Carlo Ancelotti y de evitar la rápidas transiciones que tan bien hacen los jugadores blancos con jugadores como Vinicius, Rodrygo y el propio Bellingham.

También Ancelotti ha recurrido a la final del pasado año para preparar esta final. El técnico italiano ya ha hecho ver a sus jugadores fases de aquel encuentro para que no se repita lo sucedido, cuando los blancos corrieron detrás del balón durante muchos minutos y solo pudieron maquillar un resultado muy adverso en los últimos minutos con un gol de Benzema.

La conquista de aquel título por parte del Barça supuso un cambio en el estado de ánimo de los barcelonistas, que no levantaban un trofeo desde el mes de abril de 2021, meses antes de que Leo Messi dejase el club. También fue un impulso definitivo para conquistar la Liga. El Barça llegó a aquella Supercopa líder con tres puntos más que el Real Madrid y se proclamó campeón en el campo del Espanyol cuatro jornadas antes del final, mostrándose muy superior a los blancos.

Desde el club, con la conquista de aquellos dos títulos y a pesar de haber sido eliminados por el propio Real Madrid en las semifinales de la Copa del Rey con goleada en el Spotify Camp Nou, se proclamó el inicio de una nueva era que no ha acabado de llegar o consolidarse esta temporada.

Tener el balón

De hecho, el Barça llegaba a esta Supercopa con dos victorias consecutivas en este inicio de 2024 ante la UD Las Palmas y el Barbastro, pero con muchas dudas en su juego, dudas que arrastra durante prácticamente todo el curso. No es contundente en las áreas y no logra tener el control del juego en muchas fases del partido, algo que será clave ante un Real Madrid que te hace daño a la mínima oportunidad que tiene.

Por ello, no sería extraño que Xavi regrese a la fórmula de los cuatro centrocampistas. Con Cancelo descartado, el Barça volverá a cerrar con tres centrales y, posiblemente, con Araujo desplazado a la derecha para cubrir a Vinicius.

Con Gündogan y Frenkie de Jong en la base de la jugada tras el buen partido de ambos ante Osasuna, el regreso de Pedri será clave para que los azulgranas tengan el balón, mientras Sergi Roberto podría ser el cuarto centrocampista. Joao Félix apunta a titular tras su buena media hora en la semifinal del pasado jueves.

Por parte blanca, Kepa se mantendrá en la portería a pesar de los errores cometidos ante el Atlético de Madrid. Ancelotti no quiere ‘matar’ al cancerbero. Carvajal está recuperado y Kroos puede entrar en el centro del campo por Modric. El resto, los mismos que ganaron la semifinal en un partido jugado a un ritmo muy alto, con una intensidad que el Barça deberá igualar si quiere salir airoso del choque y ganar la final.

El clic necesario

La Supercopa es un título menor, pero parece algo más que una conquista en esta ocasión. El Barça quiere demostrar que la nueva era proclamada hace un año puede tener continuidad. Necesita una gran victoria ante el eterno rival, como el año pasado, para que se produzca un punto de inflexión en su juego y en los ánimos de la afición.

Ello ayudaría en lo que queda de temporada para intentar remontar los siete puntos de desventaja en la Liga ante Real Madrid y Girona y luchar por la Copa y la Champions.

El partido también servirá para que Xavi y Ancelotti desempaten en sus enfrentamientos directos. Se han enfrentado ocho veces, con cuatro triunfos para cada uno y catorce goles a favor y en contra para cada uno de sus equipos. La final de la Supercopa de Riad decantará la balanza. Xavi espera que sea a su favor y sirva para que su equipo despegue de forma definitiva.