El pleno del Consell presidido por Ximo Puig nombrará previsiblmente hoy a Aurelio Martínez como nuevo presidente del puerto de Valencia en sustitución de Rafael Aznar. El Consell ha elegido a Martínez por su experiencia en Navantia y el Instituto de Crédito Oficial (ICO), y ha consensuado el nombre con el sector. El expresidente Alberto Fabra ya barajó el relevo de Rafael Aznar tras su imputación por los supuestos delitos malversación y prevaricación en los gastos del puerto. Rafael Aznar aseguró ayer a Levante-EMV que el propio gobierno de la Generalitat le comunicó su revelo y añadió que Martínez «lo hará muy bien» porque tiene mucha experiencia.

La elección de Aurelio Martínez ha tenido una buena acogida en el sector empresarial valenciano, al considerar que da el perfil para el puesto. De hecho, ha costado encontrar a una persona de su experiencia, que durante el segundo gobierno de Zapatero estuvo al frente de Navantia, la sociedad pública dedicada a la construcción naval militar. Alberto Fabra, sin embargo, no llegó a sustituir a Rafael Aznar al no encontrar el candidato idóneo. El Consell, sí que aprobó en ese momento el cambio del también imputado José Joaquín Ripoll como presidente del puerto de Alicante.

Rafael Aznar llegó a la presidencia del puerto hace once años y su paso ha estado marcado por las luces del crecimiento del recinto y las sombras judiciales. El puerto de Valencia acaba de recuperar el liderazgo del transporte de mercancías por contenedor en el Mediterráneo y ha obtenido unos beneficios netos en el primer semestre del año de nueve millones de euros. Por contra, el titular del juzgado de Instrucción número 14 de Valencia, Félix Blázquez, mantiene imputado a Aznar desde noviembre de 2014.

El magistrado pidió hace dos años a la Intervención General un informe exhaustivo sobre la fundación Valenciaport tras aparecer denuncias de supuesta malversación. La Fundación Valenciaport supuestamente ha operado en los últimos años como una auténtica agencia de colocación de directivos y ex altos cargos del puerto en calidad de profesores de diversas áreas de formación, investigación y cooperación de esta entidad sin ánimo de lucro. Las conclusiones de la Intervención inciden en que el dinero que pone la Autoridad Portuaria a la Fundación incumple la normativa que rige el funcionamiento de las fundaciones. La investigación está centrada en el gasto de tres millones de euros para la ampliación del muelle de MSC, en la inversión de otros tres millones para construir un puente utilizado por la empresa privada Valmor para la Fórmula 1, en el patrocinio del Palau de las Arts y la compra de entradas de la Fórmula 1, en el barco del puerto, rebautizado por Rafael Aznar como «vehículo institucional», en la casa en la que vive el responsable del puerto, en la contratación de sus hijos por empresas que han trabajado para la Autoridad Portuaria y en el despido supuestamente improcedente de dos directivos que puede costar medio millón de euros.

El presidente del puerto aportó documentación para justificar que las decisiones que adoptó estaban avaladas por el consejo de administración y supervisadas por la Abogacía del Estado y los órganos que se encargan de fiscalizar el funcionamiento de la entidad pública y aseguró al juez que su trabajo lo avalan los buenos resultados del puerto.

La Fiscalía no cuestiona la gestión de Rafael Aznar sino la posible comisión de delitos por supuestamente no respetar las normas de contratación o por el adelanto del dinero para el puente de la Fórmula 1 que necesitaba Valmor.

Rafael Aznar es funcionario del puerto y ahora tiene previsto volver al puesto que dejó antes de ser nombrado presidente del puerto hace once años.