El presidente de CaixaBank, Jordi Gual, aseguró ayer que la cuarta revolución industrial que supone la transformación digital «obliga a todos los sectores a adaptarse al cambio» y que el desarrollo de las nuevas tecnologías está cambiando de forma sustantiva las relaciones económicas, pero añadió que, en la banca, «la confianza del cliente es el principal activo del negocio». Gual, quien abogó por el «aprendizaje continuo», explicó que la entidad con sede en València «apuesta por poner la tecnología al servicio de las personas. El objetivo es ofrecer nuevos servicios y mejorar la experiencia del usuario, asegurando que el cliente siempre utiliza el canal que más le conviene».

El máximo responsable de la entidad financiera impartió ayer tarde la ponencia de clausura de la decimotercera edición del curso 15x15 de Edem Escuela de Empresarios, un programa formativo cuyo signo distintivo es que el claustro de profesores está formado por quince empresarios y ejecutivos, como es el caso este año de Carlos Bertomeu (Air Nostrum), José Ignacio Goirigolzarri (Bankia), José Remohí (IVI), Juan Roig (Mercadona) o Josep Terradellas (Casa Tarradellas).

El acto de ayer, al que asistieron más de 800 empresarios, estuvo marcado por el homenaje que los asistentes rindieron a Francisco Pons, fallecido el pasado mes de enero y quien fue presidente de la escuela de negocios en su primer año.

Para él tuvo sentidas palabras la actual presidenta, Hortensia Roig, y también su padre Juan, quien asimismo destacó que «en Marina de Empresas formamos cada año a más de 2.000 alumnos en Edem y estamos acelerando en este momento a 115 empresas en Lanzadera, pero necesitamos que sean más y estoy seguro que, entre todos, haremos aún más grande el proyecto aunando esfuerzos; por eso me gustaría pediros colaboración para conseguir un espíritu empresarial entre nuestros jóvenes».