A la par que se extiende la digitalización de la intermediación financiera y que los bancos reducen su red de oficinas y las adaptan a estos nuevos tiempos de márgenes estrechos y contención de costes, las entidades están cambiando su relación con la clientela. Más servicios por internet y en el cajero y más trato directo en todo lo demás. En este contexto, la gran banca está dando pasos acelerados en la extensión de sus horarios con la creciente apertura de sucursales por la tarde.
El último en sumarse a esta tendencia es el líder español, el Santander, que el miércoles llegó a un preacuerdo con CC OO que afecta a 500 oficinas smart red, es decir aquellas que están especializadas en asesoramiento con cita previa. Estas sucursales no abrirán todas las tardes, sino que lo harán en función de la programación de reuniones de los trabajadores con los clientes. La asignación de los empleados a estas oficinas será voluntaria y estará remunerada con una compensación anual de 3.500 euros por trabajar dos tardes a la semana, es decir, cien al año. Fuentes de la entidad financiera aseguraron ayer a este diario que, de las 500 sucursales, 50 se encuentran en la Comunitat Valenciana, once de ellas en la capital autonómica.
Antes que el Santander, las otras grandes entidades del país ya se habían lanzado a las aperturas vespertinas, a excepción del segundo banco, el BBVA, que no tiene ninguna oficina que abra por las tardes, pero que dispone de su propio modelo de atención al cliente fuera de los horarios tradicionales. Se trata de BBVA Contigo, implantado desde 2011 y fundamentado en la especialización a través de 1.400 gestores remotos que atienden a sus clientes en horario de mañana y tarde y que, en el supuesto de solicitar atención presencial, pueden hacerlo con una cita previa. Un usuario de BBVA puede realizar prácticamente todas sus operaciones a través de esta fórmula. La entidad prevé alcanzar este año los 1.800 gestores. De los 1.400 actuales, más de 240 están en la Territorial Este, donde está integrada la Comunitat Valenciana.
La pionera en las aperturas vespertinas fue Bankia. La entidad con sede en València tiene en estos momentos un total de 130 oficinas denominadas «ágiles», que abren de forma ininterrumpida de lunes a jueves de 8.15 a 18.00 horas, mientras que los viernes cierran a las dos y cuarto del mediodía. En este caso, no se trata de sucursales especializadas, dado que la clientela que acude a estas oficinas suele realizar operaciones sencillas como ingresos/reintegros en cuenta, transferencias o pago de recibos no domiciliados e impuestos, principalmente.
El otro banco con domicilio social en València, CaixaBank, introdujo también en 2013 las denominadas oficinas Store, cuyo horario de atención al público es muy similar al de Bankia, aunque de lunes a jueves empieza un cuarto de hora más tarde y el cierre es a las seis y media de la tarde. En estos momentos, ya tiene 210 sucursales con ese horario. Cinco de ellas se encuentran en la Comunitat Valenciana tras las dos aperturas de esta semana en la Gran Vía Marqués del Turia y la Avenida del Puerto, ambas en la ciudad de València. Las otras están en la calle Barcas, en Castelló y Gandia. Se trata de oficinas que ofrecen un servicio universal, muy digitalizado, con uso intensivo de tablets tanto por parte del cliente como del trabajador y una vocación clara de atención personalizada.
Elda y Torrent
Por último, el Sabadell ha iniciado en Elda y Torrent la puesta en marcha de un nuevo modelo de negocio con oficinas rápidas para operaciones de caja que abren por la tarde. La intención es llegar a 150 en 2020. El propósito del banco con sede en Alicante es concentrar los servicios de efectivo en determinadas sucursales y automatizar esta tarea gradualmente en el resto de la red. No obstante, como indicaron fuentes del banco, la entidad «adapta sus horarios a las necesidades del cliente». De ahí que, al margen del nuevo formato, haga tiempo que 40 oficinas de empresas tengan horarios ampliados, al igual que algunas sucursales ubicadas en polígonos industriales.
