Gerocleop, la sociedad cabecera de la actividad de residencias de mayores del grupo Cleop, ha recibido el apoyo de los acreedores a su propuesta de convenio. El acuerdo aprobado ayer prevé el pago de la totalidad de la deuda a los acreedores ordinarios, sin quita, en un plazo de tres años con uno de carencia.

El convenio fue aprobado por el 57,73 % del pasivo ordinario, un porcentaje superior al exigido, según informó la compañía por medio de un comunicado. La empresa incidió en el «amplísimo apoyo» recibido de los acreedores comerciales y entidades financieras, con más del 94 % de su pasivo ordinario, deducidos los créditos de las administraciones públicas (que no han emitido voto).

La compañía subrayó que la totalidad de los comparecientes a la junta de acreedores de Gerocleop votaron favorablemente el convenio. La empresa que lidera Carlos Turró agradeció «la confianza y decidida colaboración en el futuro inmediato de la empresa», en la comunicación realizada a la Comisión Nacional del Mercado de Valores sobre el resultado de la junta de acreedores.

Los responsables de Gerocleop habían llegado a un acuerdo con los acreedores a principios de año, pero la aprobación definitiva se ha demorado porque el juzgado pidió tiempo para estudiar la documentación.

La aprobación del convenio supone un balón de oxígeno para Cleop, que también se encuentra en dificultades. La compañía de construcción y servicios se vio obligada el verano pasado a vender dos residencias geriátricas para hacer frente a la deuda que mantenía con Hacienda y la Seguridad Social. En concreto, la empresa traspasó la totalidad de las acciones de Geriátrico de Manacor y Novaedat Picafort a Grupo 5 Acción y Gestión Social. Tras el pago, Hacienda y la Seguridad Social decidieron dar una segunda oportunidad a la compañía y desistieron de seguir adelante con la petición de liquidación que habían planteado en el juzgado de lo Mercantil número 3 de València.

Cleop redujo sus pérdidas en el primer trimestre del año y ve factible cumplir con el convenio de acreedores. La firma perdió en el primer trimestre del año 82.000 euros frente a los 122.000 euros de pérdidas que registró el año pasado. Durante tres los primeros meses del año, la cifra de negocio y el resultado bruto de explotación fue de 4,071 millones y 614.000 euros respectivamente frente a los 7,145 millones y 964.000 euros en el mismo periodo del año pasado por la venta de los geriátricos de baleares.