La ciudad de Castelló es la capital de provincia de la Comunitat Valenciana con la mayor presión fiscal. Con 707 euros por habitante, supera en 176 a València y en 222, a Alicante, según un informe sobre los ingresos tributarios en 2018 presentado ayer por el Consejo de Economistas. La capital de la Plana ocupa el puesto número once del ranking nacional. Tanto València (531 euros) como Alicante (485) están por debajo de la media de 677 euros.
El análisis incluye las tasas y cinco grandes impuestos municipales. En el IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles), Castelló ocupa la segunda posición con 419,8 euros, por detrás de Madrid (438,9). València se queda en 290 y Alicante, en 261. En el IAE (Impuesto de Actividades Económicas) el primer puesto autonómico es también para Castelló, con 41,9 euros por habitante, por 28,9 de València. Lo mismo sucede con las tasas (163 € de la primera por 140 de la segunda y 125 de Alicante). En el impuesto a los vehículos, Castelló es tercera en España, con 62,8 €, y en el de construcciones y obras se sitúa en la parte baja, con 11,8 ?, por 11,4 de València.