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La Comunitat Valenciana pierde el 3 % de sus oficinas bancarias en seis meses

Las entidades financieras han cerrado en el primer semestre del año un total de 75 sucursales, con lo que el número está ya por debajo de 2.500

Exterior de una oficina bancaria en València. m. a. montesinos

La Comunitat Valenciana perdió en el primer semestre del año el 3 % de las oficinas bancarias que tenía al finalizar diciembre de 2018 y ha bajado por primera vez desde hace décadas de las 2.500 sucursales. En concreto, entre enero y junio de 2019 cerraron 75 establecimientos, con lo que la cifra de los despachos financieros ha pasado en seis meses de 2.559 a 2.484, según los últimos datos del Banco de España. La cifra, sin embargo, va a ir a la baja en la segunda parte del año, dado las clausuras previstas.

En especial las de las de dos de las mayores entidades financieras del país, que están en pleno proceso de reestructuración de su red -y de sus plantillas- para afrontar dos de los grandes retos del sector: la caída de los márgenes por los bajos tipos y, por tanto, la búsqueda de rentabilidad, y la presión que ejerce el negocio desde internet.

CaixaBank prevé el cierre de 821 sucursales, de las cuales 80 corresponden a la Comunitat Valenciana. No todas ellas restan al balance global porque algunas -como es el caso de Caixa Popular y la que CaixaBank tenía en Amadeo de Saboya de València- han sido adquiridas por otras entidades financieras para abrir nuevas oficinas. Por su parte, el Banco Santander prevé realizar 1.150 cierres en diversas tandas. El pasado viernes concluyó una de las primeras, que se sustanció en 176 clausuras, incluidas 17 en la Comunitat Valenciana.

El cierre de sucursales en la autonomía ha sido singularmente intenso en el segundo trimestre, cuando dejaron de estar operativas 43. Asimismo, la zona más damnificada en los seis primeros meses del año ha sido la provincia de València, donde han desaparecido 57 locales y el número global ha quedado en 1.291, mientras que Alicante solo ha perdido once (hasta 894) y Castelló, siete (hasta 299).

En el conjunto de España, los cierres de sucursales financieras han sido algo menos acusados que en la Comunitat Valenciana, dado que el descenso fue del 2,4 %. En concreto, dejaron de contabilizarse 603 oficinas, con lo que el número final se ha quedado en 25.408.

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