En España, cinco autoridades portuarias (València, Algeciras, Barcelona, Las Palmas y Bilbao) acaparan el 90 % del volumen de todo el sistema portuario español. Antes de que llegara la crisis económica derivada de la pandemia de coronavirus el Puerto de València creció un 4,96% en 2019, con un récord histórico de 5,44 millones de contenedores (frente a los 3,32 millones del de la ciudad condal), mientras que el sistema portuario español avanzaba un 1,53% en este periodo. En tráfico de contenedores el valenciano supera con creces al catalán, si bien ambos compiten por el tráfico de importación y exportación y por captar los bienes procedentes de Madrid. El recinto barcelonés se beneficia de sus mejores conexiones ferroviarias con la capital de España, Aragón y Francia. Además, sus nuevos accesos, con ancho de vía internacional, han permitido incrementar la cuota de transporte de este modo del Puerto de Barcelona, que ahora está en el 13,3 % del total de sus terminales; cifra que cae al 8,3 % en el caso del valenciano. Con todo, el recinto del Grao refuerza su posición de liderazgo como primer puerto español por conectividad y avanza dos posiciones tanto a nivel europeo como mundial. Según el reciente informe Liner Shipping Connectivity Index (LSCI), el de València es el cuarto en el ámbito europeo y el 21º del mundo (Barcelona es 24º). El ranking mundial está liderado por los principales puertos asiáticos, con Shangai a la cabeza.
