La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) ha asegurado este lunes que la reciente reforma de la Ley de la Cadena Alimentaria de nace "lisiada" porque "consiente contratos de compraventa de naranjas a unos precios ruinosos que solo cubren la tercera parte de los costes de cultivo, lo que quebranta el objetivo prioritario de esta legislación que radica en garantizar precios por encima de los costes de producción".

Según ha informado la asociación en un comunicado, las cotizaciones a pie de campo de las naranjas de la variedad Navelina se han hundido hasta los 0,09 €/kg, una cantidad "muy por debajo" de los costes, establecidos en 0,23 €/kg durante la última campaña por el Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) y de los cerca de 0,30 €/kg que la asociación prevé que han alcanzado en esta temporada debido a la escalada histórica de los insumos, como la energía eléctrica, el gasóleo, los abonos o los fitosanitarios.

El presidente de AVA-Asaja, Cristóbal Aguado, ha exigido al Gobierno que "sea valiente para demostrar que su nueva Ley de la Cadena sirve para algo y puede dar solución a los abusos comerciales perpetrados en esta campaña citrícola".

"Es evidente que el agricultor se ve obligado a claudicar ante el operador comercial, pues ante la posibilidad de perderlo todo, no tiene otra alternativa que aceptar una limosna aunque esté muy lejos de cubrir sus gastos reales. El Gobierno no puede seguir de brazos cruzados y debe hacer cumplir su legislación de manera contundente", ha exigido.

En ese sentido, la asociación ha reclamado al Gobierno que abra una comisión de investigación para analizar la situación del mercado citrícola y, en caso de no hacerlo, pide el amparo de los partidos políticos para solicitar su puesta en marcha "de modo inmediato".

Aguado también ha acusado al Gobierno de "ceder e incluso fomentar en el seno de la Unión Europea (UE) la firma sistemática de acuerdos comerciales con países terceros que multiplican las importaciones de cítricos y otros productos vegetales, hasta el extremo de expulsar a la producción comunitaria de su propio mercado". El presidente de AVA-Asaja ha reclamado a Madrid y Bruselas "una drástica corrección de las concesiones incluidas en estos tratados, empezando por el acuerdo con Sudáfrica que está ahora mismo bajo revisión".

Según datos del Ministerio de Agricultura, las importaciones citrícolas originarias de Sudáfrica con destino a la UE han aumentado un 33 por ciento en los cinco años que está vigente el último tratado comercial, por lo que han pasado de 470.255 toneladas en 2017 a 629.545 en 2021 (enero-septiembre).

En naranjas, Sudáfrica ha incrementado en un 68% sus envíos a la UE durante el pasado mes de octubre, al inicio de la comercialización de las naranjas Navelina en España, lo que es, a juicio de AVA-Asaja, un factor "decisivo" para explicar el hundimiento de los precios en origen. En mandarinas, Sudáfrica ha exportado en septiembre un 44% más respecto al mismo periodo del año anterior, lo que igualmente ha provocado un desplazamiento de las variedades extratempranas nacionales.

Aguado ha remarcado que "el Gobierno español y la Unión Europea parecen dispuestos a acabar con sus agricultores, usándoles como moneda a cambio de beneficiar a otros sectores económicos". "O los políticos se ponen las pilas en defensa del campo o retomaremos las movilizaciones de manera más contundente y menos pacífica, porque nos estamos jugando nuestra supervivencia y vamos a vender cara la piel", ha concluido.