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El área metropolitana de València se queda sin viviendas de alquiler de 400 €

La inmobiliarias advierten de que para encontrar pisos asequibles «hay que irse a vivir a Xàtiva y coger el tren para trabajar en la capital»

Un hombre observa la oferta de viviendas en una inmobiliaria de Xàtiva. MARIOLA SÁNCHEZ

València y su área metropolitana se han quedado sin pisos de alquiler asequibles por la presión de la demanda. Las inmobiliarias advierten de que para encontrar pisos de 400 euros «hay que irse a vivir a Xàtiva y coger en tren para trabajar en la capital». El stock de viviendas de arrendamiento se ha desplomado por la necesidad de alquilar de familias que no pueden acceder a la compra. 

En València es misión imposible encontrar pisos de 600 euros al mes y la presión se ha desplazado al área metropolitana. En los 43 municipios de l’Horta solo hay nueve viviendas de 500 euros, y en Camp de Túria se ofertan tres, según datos de la plataforma inmobiliaria idealista. Los alquileres han subido en el último año un 35 % en Bétera, un 23,9 % en la Pobla de Vallbona, un 22 % en Picassent y un 20 % en Xirivella. 

El Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (API) de Valencia confiesa la preocupación de las inmobiliarias por la falta de oferta y la subida del coste de los arrendamientos. «Como los alquileres están tan elevados muchos clientes se están yendo a pisos compartidos. Por menos de 400 euros es imposible encontrar algo digno en el área metropolitana. Lo que se ofrece por precios bajos hay que mirarlo con lupa porque puede tener algún problema. Por 400 euros hay que irse a vivir a Xàtiva», sentencia Vicente Díez, portavoz de los API de Valencia.

Cristina Recasens, fundadora de Recasens Real Estate, insiste en que el problema es la falta de oferta. «Ante el incremento del precio de los alquileres en València, la gente se ha ido desplazando al área metropolitana. Esto ha provocado un traslado de la tensión de precios. Un piso de dos habitaciones de 70 metros cuadrados que hace 18 meses costaba 450 euros en Picanya ahora no baja de los 650 euros. En Burjassot no hay nada por 400 euros ni sin ascensor. En València no encuentras pisos de menos de 700 euros y los que hay por eso precio no interesan por su ubicación o por su estado».

Máximo histórico

El precio de los pisos en València, según Idealista, alcanzó en agosto su máximo histórico con un coste medio de 10,3 euros el metro cuadrado al mes. En el último año, las rentas en la capital del Túria han subido de media un 16 %. El distrito más caro es Ciutat Vella (por los pisos turísticos) con alquileres que rondan los 13,1 euros el metro cuadrado (1.310 euros una vivienda de 100 metros), seguido de l’Eixample (12 euros), Poblats Marítims (10,7 euros) y Extramurs (10,6 euros). En distritos como Extramurs los arrendamientos han subido un 23 % en los últimos doce meses con picos del 25,7 % en el Botànic. La renta media de una vivienda en la capital es de 1.092 euros, según un informe de la Cátedra Observatorio Vivienda de la Universitat Politécnica de València presentado a principios de año.

Los pisos de alquiler más caros del área metropolitana están en Alboraia con un precio medio del metro cuadrado de 15,3 euros (1.530 euros una vivienda de 100 metros). El metro cuadrado en Mislata cuesta 8,4 euros, en Paterna sale por 7,6 euros y en Torrent vale 7.4 euros de media.

En los seis primeros meses del año ha caído un 57 % el número de pisos libres en València al pasar de 2.817 a 1.124

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En los seis primeros meses del año ha caído un 57 % el número de pisos libres en València al pasar de 2.817 a 1.124, según datos de la plataforma Idealista. Tras el estallido de la pandemia, cerca de cinco mil viviendas turísticas entraron en el mercado del alquiler de larga estancia, pero esa situación se revirtió con la vuelta del turismo de masas. En toda la provincia solo quedan disponibles 2.728 viviendas.

«La situación es complicada. Hay casos de personas que se han divorciado y se han tenido que ir a vivir con sus padres porque el sueldo no les alcanza para pagar un alquiler», asegura Vicente Díez.

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